Redacción.- Nuevo brote de coronavirus en China. El gobierno chino ordenó la paralización de la ciudad de Harbin, capital de la provincia de Heilongjiang, la que se ha convertido en el epicentro del nuevo brote de coronavirus en el país asiático. La ciudad china de Harbin, capital de la provincia nororiental de Heilongjiang y fronteriza con Rusia, mantiene una cuarentena de 28 días tras registrar un incremento de los casos de positivos luego de que una estudiante regresó de Nueva York.
La nueva medida contempla que ni los residentes de otras ciudades ni los coches que estén registrados fuera de Harbin puedan entrar a las zonas residenciales de la urbe. Al mismo tiempo, medios locales señalan que todos los residentes locales deben tener un código QR para confirmar que no están infectados y portar mascarilla.
Así, todo portador de un pasaporte chino que llegue a la ciudad -los ciudadanos de otros países tienen vetada la entrada a China desde el pasado 28 de marzo- deberá someterse a dos análisis de ácido nucleico, uno de anticuerpos y los citados 28 días de cuarentena con el objetivo de detectar y controlar de manera temprana cualquier infección.
El número de casos positivos en Harbin creció significativamente después de que un residente de 87 años identificado como Chen infectara a 78 personas tras recibir asistencia médica en dos hospitales. Se informa que entre los contagiados están miembros de su familia, otros pacientes de estas clínicas y personal médico.
Asimismo, las autoridades recompensarán con hasta 2.000 yuanes (280 dólares o 260 euros) a quienes informen sobre individuos llegados a la ciudad que no se registren e intenten sortear estas medidas.