Redacción / Didier Madera.- La Península de Yucatán sentirán los efectos de un extenso cúmulo de polvo del Sahara, previsto para la próxima semana, anunció el coordinador de la Agencia de Meteorología Meteored-México, Juan Antonio Palma Solís.
Señaló que el fenómeno se sentiría entre el próximo lunes 22 y miércoles 24, por lo que los yucatecos constatarán ambiente brumoso así como amaneceres y atardeceres con colores naranjas y rojizos.
Incluso, las partículas del desierto del Sahara son benéficas para el crecimiento de las plantas, aunque de igual forma hace que disminuyan las lluvias.
“Es normal que el polvo del Sahara arribe a la Península de Yucatán, presentándose cada año en nuestra región con intensidad variable”, acotó.
Expresó que esta capa de aire contiene arena y aerosoles dispersos que se levantan dentro de las tormentas de arena que se forman al occidente de África.
Puntualizó que partículas se elevan a grandes alturas y se integran a las corrientes de aire de los vientos alisios o del Este.
“Son los vientos alisios los que se encargan de transportar todo este polvo a lo largo del Océano Atlántico y Mar Caribe y logran llegar la Península, así como regiones del sureste y Oriente de nuestro país. De igual forma se depositan sobre las Antillas y Norte de Sudamérica”, subrayó.
En torno a las características tiene el polvo del Sahara, la combinación de los rayos del sol y nubosidad en el horizonte al amanecer y atardecer con estas partículas de polvo, suelen dejar tonos naranja y rojo que traen vistas espectaculares.
De la misma manera, pueden dejar cielos con mucha bruma que prácticamente no dejan ver el azul del cielo.
Comentó que dichas partículas del desierto africano provocan en algunas ocasiones la disminución en las precipitaciones sobre las regiones en las que se mueve, e incluso inhibe la formación de ciclones tropicales cuando existe una gran cantidad de polvo en la zona.
Enunció que tal fenómeno se debe a que integra aire seco en diversas capas de la atmósfera, lo que impide la formación de nubes.
Otro tipo de influencia es que esta capa de polvo trae nutrientes que ayudan al crecimiento y desarrollo de la vegetación.
Finalmente, mencionó que al menos en México no hay evidencia que represente algún tipo de amenaza a la salud pública.