Redacción.- Israel lanzó nuevos ataques aéreos en Gaza el martes, derribando un edificio residencial de 13 pisos, que según medios fue evacuado una hora antes. Ese día, también se encendieron las alarmas de Tel Aviv por el lanzamiento de cohetes desde Gaza. Desde el lunes, al menos 35 palestinos, incluidos 12 niños, han muerto, según autoridades de salud palestinas, y al menos cinco israelíes perdieron la vida. Tercer día de ataques y estamos más cerca de una “guerra a gran escala” según Naciones Unidas. El gobierno de Israel respondió con más de 500 bombardeos a más de 1.000 cohetes disparados por Hamás desde Gaza, según el Ejército israelí.
El intercambio de ataques representa “la mayor escalada del conflicto desde 2014”, según France 24. Este lunes, choques entre fuerzas israelíes y palestinos en la mezquita de Al-Aqsa, uno de los lugares más sagrados del Islam, dejaron a cientos de personas heridas.
La peor escalada de tensiones desde 2014 se materializó en el intenso intercambio de ataques entre las fuerzas israelíes y las milicias palestinas, lideradas por el grupo armado Hamás. Promete Benjamín Netanyaju “intensificar la intensidad y el ritmo” de los ataques. Gantz dice que “por cada día que disparen contra ciudadanos israelíes, les haremos retroceder años”.
En Gaza, un edificio de 13 plantas fue derrumbado tras un bombardeo por parte de Israel. El edificio, que quedó completamente destruido, albergaba oficinas de varios altos mandos del movimiento Hamás cerca de la costa en la Franja de Gaza, informaron reporteros de la agencia francesa AFP.
La génesis de este nuevo capítulo del conflicto podría situarse a inicios del Ramadán, el mes sagrado musulmán, cuando las fuerzas de seguridad israelíes instalaron barricadas en las escalinatas de la Puerta de Damasco. El lunes, hubo cientos de heridos tras la escalada de violencia en la mezquita de Al-Aqsa después de días de enfrentamientos. Las fuerzas israelíes han entrado en el complejo disparando proyectiles de goma, gases lacrimógenos y bombas aturdidoras contra los fieles palestinos que se encontraban rezando en el lugar.
Según la Media Luna Roja, más de 300 palestinos han resultado heridos. Más de 200 han sido atendidos en hospitales y al menos siete personas se encuentran en estado crítico. Según la radio del ejército israelí, 21 soldados israelíes también han resultado heridos.
Las protestas en Jerusalén se extendieron en los últimos días a múltiples ciudades árabes de Israel. Ayer, en la ciudad mixta (árabes y judíos) de Lod, un palestino murió por los disparos de un residente judío que intentó evitar que los manifestantes se acercaran a su residencia.
Hamas se opone a negociar un alto el fuego hasta que Israel retire todas sus fuerzas de la Explanada de la Mezquitas y de Sheikh Jarrah, barrio del este de Jerusalén en el que varias familias serán desalojadas y sus casas pasarán a manos de colonos.