Redacción.- La declaración del estado de emergencia no hizo que los manifestantes antimedidas sanitarias contra el coronavirus y negacionistas del COVID19 se retiraran de las calles de la capital canadiense, Ottawa. Miles seguían bloqueando un puente fronterizo con Estados Unidos pese a la intervención de la policía. Las críticas contra el primer ministro Justin Trudeau por la inacción frente a los manifestantes, a los que ha permitido apoderarse de la capital durante semanas, han llegado al punto de exigir su renuncia.
Desde ayer la policía empezó a desalojar camiones y otros vehículos que desde hace seis días bloquean el puente internacional Ambassador en la capital Ottawa, lo que ha provocado fuertes pérdidas económicas en Canadá y Estados Unidos. Otros dos puentes fronterizos siguen tomado en Canadá, mientras los manifestantes, radicales de extrema derecha, camioneros, inclusive neo nazis y negacionistas del coronavirus, insisten en que no cejarán con su movimiento.
La policía se desplegó en los alrededores del puente Ambassador, que une Windsor (en Canadá) y Detroit (Estados Unidos), luego de que el Tribunal Superior de Ontario ordenara evacuar a los manifestantes que lo ocupaban desde hace cinco días. Asimismo, aparecieron grúas cerca del puente Ambassador en Canadá para retirar parte del convoy que bloquea el ingreso a la frontera con Estados Unidos, hoy domingo.
Mientras tanto, en Europa, la policía de París mantiene un fuerte despliegue, al día siguiente de detener a casi 100 personas durante una gran protesta contra el certificado de vacunación anticovid inspirada en otra de camioneros de Canadá que se expandió ya a otros países.
Las protestas han repercutido fuera del país, con convoyes de inspiración similar en Francia, Nueva Zelanda y Holanda. El Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos advirtió que era posible que se estén preparando protestas similares camioneros en Estados Unidos.
TRUDEAU, EN JAQUE
Mientras tanto el primer ministro Trudeau advirtió: “Si te unes a las protestas, las consecuencias serán muy severas, podrías terminar perdiendo tu licencia, tener un antecedente criminal que te afectará para encontrar empleo y tu sustento económico”…
Trudeau califica las protestas de “minoría marginal y ruidosa” es fuertemente criticado por la oposición por su inacción ante los manifestantes.
La protesta partió de camioneros que se oponían a la obligación de vacunarse para cruzar la frontera con Estados Unidos, pero abarca ahora reclamos más amplios contra todas las medidas sanitarias y también contra el gobierno de Trudeau.
Dice la BBC que el autodenominado movimiento “Freedom Convoy” fue iniciado por camioneros canadienses que se oponían a una orden de vacunación o cuarentena para los conductores que cruzan la frontera.
La orden judicial del viernes contra el bloqueo fue presentada por la ciudad de Windsor y la Asociación de Fabricantes de Partes Automotrices, que argumentaron que estaba perdiendo hasta $ 50 millones ($ 39 millones; £ 29 millones) por día debido al convoy.
Las plantas de General Motors, Ford, Toyota y Honda se han visto obligadas a detener la producción y cancelar turnos de trabajo debido a la escasez de repuestos provocada por el bloqueo.
Trudeau dijo entender que los manifestantes están frustrados por la pandemia, pero agregó que “estos bloqueos están perjudicando a las familias comunes, trabajadores de plantas de ensamblaje de automóviles, agricultores, camioneros y obreros canadienses”.