Redacción.- La Dirección de Seguridad Municipal del Ayuntamiento de Progreso, envió un comunicado en el que justificó la brutal detención de dos obreros que se encontraban en la vía pública alegando que “causaban estragos (sic) en la vía pública”. Eso sí, dio a conocer que los cuatro policías involucrados en la detención arbitraria habrían dejado de pertenecer a la corporación.
En efecto, sobre los hechos violentos ocurridos y protagonizados por la policía municipal progreseña el pasado día de ayer 12 de abril del 2022 y que dimos a conocer en Infolliteras.com, se afirma en un comunicado que “elementos de la corporación se encontraban realizando rondines de vigilancia cuando control de mando indica que en la calle 19 x 78 se encontraban dos personas causando estragos en la vía pública y alterando su orden, por lo cual distintos oficiales de la Policía Municipal se trasladaron al punto para verificar los hechos”.
Asimismo, el boletín citado justifica, de nueva cuenta: “Al verificar los hechos en cuestión, se realizó la detención pertinente hacia los sujetos en cuestión, los cuales mostraron resistencia, por lo cuál, los elementos hicieron uso de la fuerza para trasladarlos al edificio policiaco para su tramite correspondiente”.
Y concluye: “Como Dirección de Seguridad Publica rechazamos cualquier uso indebido de la fuerza, por lo cual el día de hoy algunos elementos involucrados dejaron de pertenecer a esta corporación policiaca, y también fueron sancionados administrativamente de acuerdo al grado de responsabilidad que tuvo cada uno de ellos, las cuales serán supervisadas por la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Yucatán (CODHEY), autoridad con la que se está colaborando de forma imparcial y expedita. Reafirmamos nuestro compromiso para salvaguardar la integridad de las y los habitantes del Puerto de Progreso y Comisarías”.
Cabe recordar que en la nota que publicamos ese mismo día señalamos que la familia de uno de los detenidos denunció golpes y torturas en prisión. También señaló que el afectado es perseguido por la policía municipal y que ya había sido detenido anteriormente de forma arbitraria en lo que parece una venganza de elementos de dicha corporación.