Redacción.- El Presidente Andrés Manuel López Obrador dio a conocer que pedirá a la Secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) le informe sobre la situación actual de más de 250 granjas porcícolas que existen en la península de Yucatán. El presidente puntualizó que la porcicultura en Yucatán es una historia que tiene que ver con una tradición alimenticia de toda esa región.
A pregunta de un reportero que lo consultó sobre dicho tema en su conferencia diaria, el mandatario agregó que la autoridad ya se clausuró cinco granjas y que se está haciendo un trabajo en ese sentido: “le vamos a pedir a la secretaria de Medio Ambiente que nos informe. Ella ha estado trabajando en toda la península de Yucatán y me informan que ya se han clausurado cinco granjas y se está haciendo un trabajo”.
Tenemos que cuidar la península porque es un medio ambiente muy rico en flora, en fauna, los ríos subterráneos, los cenotes y es la región en donde se asentaron las antiguas culturas; en especial, la cultura maya, añadió.
Hay muchas riquezas naturales y bellezas turísticas, dijo el presidente quien añadió que tanto en la parte del golfo como ya en lo que tiene que ver con el Caribe, aunque ya no corresponda del todo a Yucatán, pero sí Río Lagartos y toda esa región de Yucatán, los antiguos puertos, el actual puerto de Progreso, Sisal, todo eso que es muy bello, y lo que hablas de cenotes, de los ríos y buscar el equilibrio.
Porque se desarrolló mucho lo de las granjas de cerdos. La porcicultura en Yucatán es una historia que tiene que ver con una tradición alimenticia de toda esa región, que incluye Cuba, que incluye la península de Yucatán, Tabasco, Campeche desde luego, y no había mucha demanda o, mejor dicho, no había producción de cerdo suficiente para la demanda, explicó.
Y primero en canoas se compraban los cerdos de Chiapas y de Tabasco para llevar a Yucatán, pasó el tiempo y ya con la carretera se llevaban los cerdos de Michoacán, del centro del país, que eran las zonas productoras de cerdo.
Y de repente por el puerto de Progreso, con la entrada de alimentos, empiezan a crearse las granjas de cerdo y además se protege el mercado, no podía uno entrar a Yucatán con un sándwich o una torta de algo que fuese hecho con carne, para proteger su producción avícola y de cerdos, todo un plan de sanidad animal.
Pero lo cierto era de que mientras los neoliberales abrían las fronteras de manera indiscriminada, sin límites estratégicos, en Yucatán se protegían las fronteras, se cerró y creció la industria porcícola al grado que de comprar los cerdos del centro y otros estados del sureste ahora son los que venden.
El presidente insistió, tras puntualización del reportero sobre si se exporta la carne de cerdo, que sí, se exporta, pero ya se está rompiendo el equilibrio y en todo hay que buscar el desarrollo sustentable, no afectar el medio ambiente. Entonces, esa es la labor que tiene que hacer la Secretaría del Medio Ambiente. Sí son empleos, es producir alimentos, pero hay que procurar no dañar el medio ambiente, en todo hay que actuar de esa forma.
Y volvió sobre el tema del tren maya: Los ambientalistas que están en contra del Tren Maya, pues son falsarios, no son auténticos. Hasta me dio gusto que reconozcan que utilizaron un video que no tiene que ver con el Tren Maya, es importante pues que ellos acepten que mintieron.
Y aquí vendría la pregunta: si ese cenote apuntalado con concreto no es del Tren Maya, ¿quién fue el que lo hizo? Yo más o menos tengo una idea, pero se los voy a dejar a ustedes de tarea, porque ustedes son mirones profesionales y van a hacer la investigación.
Entonces, tenemos que cuidar el medio ambiente.
Y en el caso de Calica, afirmó: pues también ya estamos buscando un acuerdo con ellos, son tres opciones:
La clausura, porque ya no se permite que extraigan material, eso ya no se puede permitir. Que tienen muchas influencias en el Departamento de Estado, porque es una empresa que se llama Vulcan, es de las empresas constructoras más importantes de Estados Unidos, pero yo creo que hasta los mismos accionistas de Vulcan van a entender que esto no es posible, no puede haber un doble discurso de decir que nos preocupa el cambio climático y que estemos haciendo esta destrucción.
Entonces, si se van a tribunales, porque además hay denuncias, pues vamos a tribunales y vamos a hacer la denuncia formal en organismos internacionales. A ver qué van a hacer los de la ONU, a ver qué va a hacer Greenpeace, que nos ayuden en esto.
Esa es una opción.
La otra opción, que es importante para ellos y para todos, es buscar un acuerdo para que esa área impactada, más otras dos mil hectáreas que tienen ahí, se puedan convertir en un parque turístico. Tienen también pegado al mar la concesión de un puerto que puede ser utilizado como puerto de cruceros. Estamos hablando de una de las zonas más bellas del mundo en cuanto a playas, es el Caribe. Eso es lo segundo.
Y lo tercero es que les compramos el terreno completo, hacemos un avalúo de cuánto cuesta y tenemos recursos para convertir esto en un parque natural.
Toda esta zona —esto es importante también que la gente lo sepa— eran bienes nacionales y se crearon fideicomisos, era de la nación y en el periodo neoliberal se fueron apoderando de todos estos terrenos; pero, bueno, ya no nos vamos a meter a hacer una arqueología de lo agrario, ya se tiene que respetar la posición, lo que ya se llevó a cabo desde el punto de vista jurídico, aunque, la verdad, fue un gran abuso.