Redacción.- Habitantes de Santa Gertrudis Copó se quejaron de falta de agua potable en sus hogares debido al crecimiento de la comisaría meridana, es decir, por la edificación de nuevas viviendas, de nuevos desarrollos habitacionales, desde hace unos dos años. Aseguraron durante protesta a las 8 de la mañana en el cárcamo de la comisaría, al que posteriormente colocaron un candado, que las nuevas edificaciones los perjudican. Cabe mencionar que el director de Obras Públicas David Enrique Loría Magdub acudió posteriormente, aproximadamente a las 9 de la mañana y se le impidió trabajar en el lugar tras la convocatoria al pueblo realizada desde la parroquia local con el sonar de campanas. Un candado fue colocado en el cárcamo por los habitantes. Al respecto, en un comunicado que publicamos íntegro líneas más adelante, el Ayuntamiento de Mérida insiste que “trabaja para dotar de los servicios básicos esenciales a todas y todos los habitantes del Municipio, en especial de las comisarías”.
A las ocho de la mañana la comisaria, Leydi Cocom y el comisario ejidal José Teodomiro Cab Pech, explicaron la problemática que según ellos aflige a la comunidad: el agua potable desde hace dos años es insuficiente. No hay presión suficiente del sistema de agua potable en los hogares de varias familias de la comisaría incluidas algunas de las nuevas privadas construidas recientemente.
De hecho, vecinos corroboraron dicha versión afirmando a Infolliteras.com que no hay presión, el agua no cae en los tinacos y que a pesar de tener varios tinacos instalados, no hay suficiente agua en su casa, quedándose sin el vital líquido hasta por varios días, según comentaron.
La comisaria Leydi Cocom afirmó que las obras con recursos del ramo 33 se están invirtiendo en solucionar el problema pero beneficiando a los nuevos desarrollos y que ellos no ven los beneficios en los habitantes mayas de la comisaría, según comentó.
“El problema es que al estar en la zona norte nos están catalogando como zona de alta plusvalía; sentimos que a los gobiernos se les está olvidando que somos poblaciones mayas, poblaciones originarias y que hay leyes que de alguna manera nos amparan; nosotros metimos escritos al Ayuntamiento de Mérida, estamos en espera, incluido un escrito sobre un polígono que debe ser respetado por el Ayuntamiento de Mérida”, afirmó la comisaria, la que también informó que hay diferencias con las autoridades municipales respecto a la zona que sería considerada como parte del polígono de la comisaría. Leydi Cocom dijo que una solución es que los nuevos desarrollos construyan sus nuevos sistemas de agua potable, como algunos han hecho, que edifiquen sus propios cárcamos para que no utilicen la infraestructura existente y que ya claramente es insuficiente.
Cabe señalar que también afirmó que las obras propuestas por el Ayuntamiento de Mérida para dar solución al problema de desabasto de agua potable resultan insuficientes, según afirmó y comentó que una de las propuestas es construir “torres tinacos” en los domicilios que padecen de falta de agua potable, solución que rechazó.
En el lugar también se encontraban Shubert García Yay, Jefe de Atención a Comisarías del Ayuntamiento de Mérida, se encontraba en el lugar así como María Fernanda Reid, directora de Promoción Social.
Por su parte, el Ayuntamiento de Mérida, a través de un comunicado afirmó que “trabaja para dotar de los servicios básicos esenciales a todas y todos los habitantes del Municipio, en especial de las comisarías, por esa razón este martes, representantes de la administración municipal acudieron a la comisaría de Santa Gertrudis Copó para iniciar con la instalación del sistema de bombeo que dará respuesta a la solicitud de los vecinos de la población”.
Asimismo, el Ayuntamiento afirmó que a “las 08:00 horas, personal del Ayuntamiento de Mérida acudió a la comisaría de Santa Gertrudis Copó en respuesta al oficio que envió la comisaria Leydi Cocom Valencia el pasado 16 de febrero, en donde solicitaba la ampliación de la red de agua potable porque había viviendas que carecían de este servicio”.
“Así, la Dirección de Obras Públicas notificó a la comisaría que este martes 17 de mayo acudiría personal municipal para realizar labores de mantenimiento y ampliación de la red de agua potable, con lo cual se resolvería el problema de abasto de este vital líquido que presentaban las viviendas que relacionó en el oficio que remitió Cocom Valencia al Ayuntamiento”.
“Sin embargo, cuando los trabajadores municipales acudieron a la comunidad a la hora y día señalado, la autoridad auxiliar impidió que se realice esta labor, motivo por el cual, representantes del Municipio se aproximaron para dialogar con ella y exponerle que esta tarea permitiría solucionar los problemas de desabasto de agua y permitiría una mayor presión para que los tinacos de los domicilios se llenen sin problema”.
Al respecto, cabe mencionar que dichos eventos ocurrieron posteriormente a la manifestación alrededor del cárcamo y a la conferencia de prensa que atestiguó Infolliteras. Pudimos saber que las campanadas del pueblo “alertaron” de la presencia de los trabajadores municipales, a los que efectivamente la población impidió trabajar, inclusive colocando un candado en las puertas del cárcamo.
Por su parte, el Ayuntamiento de Mérida aseguró que “privilegia el diálogo como un medio para resolver los puntos de vista encontrados, opiniones diferentes o inquietudes ciudadanas, por ello, desde que se presentó la primera inquietud de Cocom Valencia, el Municipio realizó tres reuniones con ella para presentarle los detalles de estos trabajos y cómo aliviarían el problema de suministro de agua en Santa Gertrudis Copó”.
“Sin embargo, pese a este trabajo previo de exposiciones y reuniones para aclarar las dudas que tiene sobre la ampliación de la red de agua potable, la comisaria municipal acompañada de 10 vecinos decidió clausurar con un candado las instalaciones de agua potable en terreno del Ayuntamiento, impidiendo que los trabajadores realicen las labores necesarias para atender la solicitud que ella misma remitió”, añade el comunicado municipal.
Por último, el Ayuntamiento de Mérida afirma que “las autoridades municipales seguirán el camino administrativo que marcan las leyes correspondientes, además de insistir en resolver este conflicto por vía del diálogo y los acuerdos, para que permitan que el Ayuntamiento cumpla con brindar los servicios básicos a Mérida y sus comisarías”.
“Finalmente, reiteramos la disposición del diálogo para resolver las solicitudes que tienen las familias de Santa Gertrudis, ya que en este momento no tienen agua para atender sus necesidades básicas”.
Cabe señalar que en la problemática entre habitantes originarios y autoridades y desarrolladores tiene también un trasfondo cultural. Los habitantes mayas de las comisarías se quejan de que los nuevos vecinos son intolerantes a sus prácticas culturales, religiosas, a sus fiestas. Así lo explicó la comisaria y los vecinos entrevistados con Infolliteras.com.