Por fin, luego de permanecer abandonada y sin utilizar por 15 años la cámara hiperbárica multiplaza instalada en el Hospital General “Dr Agustín O’Horán” será puesta en funcionamiento al público. Asi lo informó la titular de la Secretaría de Salud de Yucatán (SSY), Judith Ortega Canto.
“Estamos esperando la firma del convenio IMSS-Bienestar a fin de que dentro de ese presupuesto a recibir y a solicitar, la cámara hiperbárica sea uno de los equipos que reciba atención urgente para su funcionamiento”, acotó.
Resaltó la importancia de la cámara hiperbárica para la atención de problemas graves y delicados, tal el caso de tromboembolias, infartos, embolias cerebrales, así como para la atención de buzos que hacen inmersiones profundas y tienen un accidente cerebral, etc.
“La cámara hiperbárica debe ser utilizada y mantenida por largo tiempo por razones obvias”, subrayó.
Tras la donación por parte del sector privado de la cámara hiperbárica multiplaza en 2009 durante la administración de Ivonne Ortega Pacheco -considerada en aquel entonces la quinta de su tipo en el continente americano– el valioso instrumento médico quedó abandonado durante dos administraciones: la de Rolando Zapata y Mauricio Vila, los que simplemente no hicieron nada por rescatar dicho equipo a pesar de algunas declaraciones como las del ex gobernador panista y su entonces secretario de salud, Mauricio Vivas, de que estaban “viendo el asunto” con el ex presidente Andrés Manuel López Obrador. Esto a pesar de lo necesario de dicho equipo para atender a la población yucateca.
Hace tres lustros, el grupo financiero Banorte donó de 11 millones de pesos para la adquisición de este equipo. La cámara hiperbárica podría haber salvado a mucha gente de la amputación de órganos, principalmente de pacientes diabéticos, en los últimos 12 años. Ahora, si se echa andar redundará en evitar afectaciones a la autoestima del enfermo, en costos por servicio de hospitalización, curación e intervenciones quirúrgicas.
La cámara hiperbárica multiplaza mide unos 17 metros de largo por 10 de ancho y cuenta con sillones tipo “reposet”, donde se les da el tratamiento al mismo tiempo, pero de acuerdo a sus necesidades.
En 2009 la administración de Ortega Pacheco dejó el equipo y parte del edificio, sin embargo el gobierno de Rolando Zapata Bello no hizo nada a pesar de que por medio del compromiso número 96 aseguró que lograría la construcción del edificio e instalación de la Cámara Hiperbárica Multiplaza.
Con la justificación de que debido a lo “complicado y oneroso del proyecto cuyo costo sería de 80 millones de pesos”, Zapata Bello modificó el compromiso. Posteriormente dijo que se modificaría el proyecto del edificio que alberga la Cámara Hiperbárica para que tuviera una nueva vocación de acuerdo con las necesidades actuales del Hospital O’Horán, privilegiando el incremento de camas en la Unidad de Choque y Trauma”, pero de todos modos, nunca se concretó. Es decir, puras justificaciones mientras su gobierno gastaba a manos llenas en viajes y obras costosas que han tenido escaso impacto hasta ahora como el centro de convenciones.