El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, advirtió al gobierno de China contra la devaluación de su moneda. El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, advirtió a China contra la devaluación de su moneda en respuesta a los nuevos aranceles, afirmando que tal medida supondría un “impuesto al resto del mundo”, según argumentó, paradójicamente, luego de que el gobierno estadounidense impuso impuestos a la mayor parte de las naciones del planeta. Bessent instó a China a no tomar esta medida y, en su lugar, a sentarse a la mesa de negociaciones. También señaló que todas las opciones de política monetaria siguen abiertas, incluida la posibilidad de eliminar empresas chinas de las bolsas estadounidenses. “Todo está sobre la mesa”, antes de agregar que será el presidente Trump quien decidirá sobre este asunto.
En cuanto a las divisas, Bessent advirtió que cualquier intento de China por devaluar el yuan equivaldría a un ataque económico contra otras naciones. La moneda nacional de China alcanzó un mínimo de 18 años frente al dólar el miércoles.
“Si China comienza a devaluar el yuan, eso es un impuesto para otros”, dijo.
Scott Bessent, dijo hoy que las negociaciones comerciales están activamente en curso tras el amplio despliegue de aranceles de la administración, con aproximadamente 70 países contactando a la Casa Blanca desde el anuncio del “Día de la Liberación”.
“China puede aumentar los aranceles, ¿pero qué importa?”, dijo Bessent a Fox News en una entrevista matutina, minutos después de que China anunciara que impondrá un arancel adicional del 50% a las importaciones procedentes de Estados Unidos.
China responde a Trump con aranceles del 84% a productos de EE UU a partir del jueves. Sigue en directo las reacciones a la guerra comercial.
Asimismo, se tornó viral el comentario del presidente estadounidense, Donald Trump, quien declaró en una cena con el Comité Nacional Republicano del Congreso que los países a los que ha impuesto aranceles están “urgidos” por alcanzar acuerdos que eviten los aranceles: “Estos países nos están llamando. Están besándome el trasero”, dijo el mandatario de los Estados Unidos presumiendo ante el público.
“Se están muriendo por llegar a un acuerdo: ‘Yo haré lo que sea, señor’”, declaró que le dicen los representantes de los gobiernos.
“Estamos haciendo un gran trabajo y vamos a cerrar lo que yo llamo acuerdos a medida, no a la carta. Son acuerdos altamente personalizados. En este momento, Japón está volando hasta aquí para llegar a un acuerdo. Corea del Sur también está viniendo, y otros países están haciendo lo mismo”, afirmó.