La Auditoría Superior del Estado de Yucatán (ASEY) registró un daño patrimonial que supera el 1 millón 252 mil pesos en el Ayuntamiento de Umán durante los primeros cuatro meses del gobierno de la alcaldesa morenista, Kenia Walldina Sauri Madariaga.
El informe fue entregado al Congreso del Estado el pasado 30 de octubre y revela dinero público justificado con gastos sin rastro y beneficiarios “fantasma” que jamás existieron.
Por ejemplo, el documento revela la existencia de casi un millón de pesos en “ayudas sociales” con firmas suplantadas y sin ningún respaldo legal.
Más de 100 mil pesos en materiales de construcción que nadie vio, nadie entregó y nadie comprobó.
155 mil pesos en supuestos eventos y mobiliario que, al parecer, solo existieron en papel.
Y otros $36 mil pesos en “apoyos sociales” sin justificación alguna.
La ASEY (Auditoría Superior del Estado de Yucatán) fue contundente: el Ayuntamiento no pudo demostrar en qué se usó el dinero ni quién lo recibió, por lo que el monto total se considera un daño directo al patrimonio municipal.
Cabe recordar que además existe una denuncia en contra de la alcaldesa ante el IEPAC (Instituto Electoral y de Participación Ciudadana) por actos anticipados de campaña, luego de que su nombre apareciera en espacios públicos con fines proselitistas.








