Redacción.- La Fiscalía General del Estado (FGE) formuló la imputación a J.I.N.C., por su presunta participación en el delito de daño en propiedad ajena cometido por incendio, denunciado tras los hechos ocurridos el pasado martes en calles de la localidad de Hunucmá. Se trata del famoso pirómano o incendiario de Hunucmá, un joven, de 18 años de edad, llamado José Isaac N.C., y que creó tremenda psicosis en el pueblo. Por lo menos, según las primeras indagaciones, el pelafustán había quemado una docena de casas de huano, su especialidad, en dicha población de Yucatán.
En días recientes fue detenido luego de que los bomberos estuvieron activos apagando el incendio en dos casas de Hunucmá, ubicadas en la calle 34 por 33 y 35; otra quemazón se armó en una palapa del bar “La Piña” (33 por 32 y 34) y, por si fuera poco, iba a culminar su imitación del emperador romano Nerón quemando una cuarta vivienda, situada en la vía 35 por 34 y 36. Pero fue detenido antes, afortunadamente.
Durante la audiencia realizada en el Juzgado Primero de Control del Cuarto Distrito Judicial, con sede en el Centro de Justicia Oral de Umán, se decretó la legalidad en la detención del imputado y los fiscales adscritos a la demarcación, tras formular el delito, presentaron los datos de prueba para solicitar la vinculación a proceso de J.I.N.C., quien estuvo de acuerdo en que se definiera su situación legal durante la misma audiencia, por lo que la autoridad judicial tras valorar los datos presentados, decretó el auto de vinculación a proceso.
De acuerdo con la información reunida en la causa penal 12/2020, los hechos ocurrieron durante las primeras horas del pasado martes cuatro de febrero, en la calle 34 de la citada localidad, donde el imputado fue sorprendido cuando presuntamente acababa de incendiar varias casas con techo de huano, por lo que fue detenido y turnado a la Fiscalía para la integración de la carpeta de investigación correspondiente.
Por último, esta representación social presentó los argumentos para solicitar la medida cautelar de prisión preventiva, misma que fue concedida por la autoridad judicial por todo el tiempo que dure el proceso y además otorgó a la defensa y Fiscalía un plazo de dos meses para el cierre de investigación complementaria, tiempo durante el cual se continuará con la indagatoria.