La opinión desde Valladolid.- El cierre de calles del centro histórico de Valladolid, protagonizado por los taxistas de varios sindicatos, puso en evidencia las graves irregularidades y violaciones a la ley que hay en ese sector, las cuales son solapadas por el alcalde Enrique Ayora Sosa, tal y como ha sucedido con administraciones anteriores, señalan voces bien informadas del sector en Valladolid.
Este conflicto surgió luego de que la Dirección de Transporte del gobierno estatal intento cambiar las reglas del juego, “poner orden y autorizar a otras personas concesiones del servicio”, ya que la ciudadanía vallisoletana se ha quejado del abuso en los precio, el mal trato de los choferes, de los vehículos en mal estado e incluso de automóviles sin placas dando el servicio desde hace tiempo.
Todo esto en clara y grave violación de los reglamentos del transporte que han solapado las autoridades municipales, según afirman autoridades del transporte estatal.
Estas irregularidades, señalan, tienen un trasfondo político, pues se sabe que la autoridad municipal está involucrada en el gremio taxista, ya que entre sus directores hay gente ligada al Sindicato “Adalberto Aguilar Osorio”, uno de los cabecillas del cierre de la plaza de Valladolid durante el fin de semana. Cierre que mantuvo secuestrado al centro de dicho municipio y cerrado al tráfico con taxis atravesados en medio de la calle.
Estos sindicatos, nos comentan, dieron su apoyo a Ayora Sosa y ahora que ven peligrar su monopolio lo acorralan y le exigen que no se toquen sus intereses, pues de lo contrario son capaces de paralizarle la ciudad.
Este secuestro de los taxistas perjudica a otros sectores sociales y económicos, como el comercial, educativo y el turístico, sin que el alcalde sea capaz de poner orden pues en realidad su llegada al ayuntamiento fue un regalo que le quedó muy grande. Hay que recordar que Ayora Sosa fue Director de Desarrollo Urbano y Obras Públicas en la administración de su antecesora, la también morenista Alpha Tavera Escalante.
Ante su falta de capacidad para la solución de este problema, tuvo que recurrir al delegado federal Joaquín Díaz Mena y a la diputada morenista Fátima Perera, lo que revela que hay intereses políticos y se trata de pagos y cobros de apoyos electorales.
Fuentes del sector comercial en Valladolid afirman que la comuna vallisoletana ha actuado de manera irresponsable en éste tema al permitir el bloqueo de la ciudad.
El lunes tendrá lugar una reunión con los taxistas inconformes pero se prevé que ante las violaciones, irregularidades y abusos de los taxistas es muy probable que el gobierno estatal intervenga de manera directa en la revisión de esas concesiones y en la legalidad de esos sindicatos. Algo que la sociedad vallisoletana ya reclama, nos señalan.