Redacción / Didier Madera.- El jefe del Jurídico del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) – Yucatán, José Arturo Chab Cárdenas, afirmó que la reapertura de las zonas arqueológicas de Yucatán se registró sin contratiempo alguno.
Asimismo, destacó que el sitio con mayor afluencia fue Xcambó, seguido de Ek’Balam, cuyos paseantes cumplieron con las condiciones establecidas para ingresar y permanecer en las respectivas ciudades prehispánicas.
Remarcó que en todo momento se respetó el protocolo de aplicación de las medidas de salud, para la prevención del Covid-19, las cuales estarán vigentes por tiempo indefinido.
Hoy inició la reapertura gradual de las ciudades precolombinas mayas de la entidad, empezando con Ek’Balam, Izamal, Mayapán, Uxmal e Xcambó, luego de que las ciudades precolombinas del país estuvieran cerradas por más de cinco meses, tras la aparición en el país del coronavirus 2 del Síndrome Respiratorio Agudo Grave (SARS-CoV-2) causante de la enfermedad Covid-19.
Durante la entrevista concedida, comentó que “la apertura es gradual y ordenada, al mismo tiempo, que de manera previa, el personal del INAH recibió la respectiva capacitación”.
Comentó que en el primer día no se registró una gran afluencia a los sitios que hoy abrieron, pues el martes 22 tocará el turno a Chichén Itzá y Dzibilchaltún.
Posteriormente, se reabrirán las 10 urbes prehispánicas, específicamente, Acanceh, Aké, Chacmultún, Grutas de Balamcanché, Grutas de Loltún, Kabah, Labná, Oxkintok, Sayil e Xlapac, pero aún no hay fecha alguna.
“A Xcambó llegaron grupos de personas de manera organizada y ordenada, veraneantes de Telchac, y en menos medida, también arribó grupos a visitantes a Ek’Balam.
“El aumento (de la afluencia turística) será paulatino, y será más notable con la reapertura del Museo Regional de antropología “Palacio Cantón”, Chichén Itzá y Dzibilchaltún”, subrayó el vocero de la dependencia federal.
Comentó que son diversas los requisitos para el acceso a los sitios así como también son varias las restricciones, y en éste segundo punto comentó que “sólo abiertas algunas partes, los núcleos principales, para evitar la dispersión de los visitantes”.
Chab Cárdenas remarcó que al menos en Yucatán, durante el cierre de las 17 zonas arqueológicas abiertas al público, “continuaron las acciones de conservación, difusión, investigación y mantenimiento de los sitios, por lo que hay una mejora en las características de estas urbes mayas”.
Estableció que las labores de los especialistas no se detuvieron, y a partir de hoy se puede corroborar el trabajo realizado.