Redacción.- Banqueteros estarían conformes con poder reabrir desde el 20 de ese mismo próximo mes o, incluso, el 1 de marzo, para poder subsistir y evitar el cierre de sus empresas, dicen. Empresarios representantes de sectores de la industria de eventos estiman, han perdido alrededor de mil 500 millones de pesos y están a un mes de quebrar, cerrar sus negocios, con el consecuente impacto para miles de yucatecos al quedar desempleados, según dicen.
En conferencia de prensa este día, el representante de los salones de eventos y banquetes, Alejandro Camino Escalante, su par de Turismo de Romance, Badel Gómez Nechar; el de Haciendas y Recintos de Bodas, Ángel Espinosa Ojeda; de banquetes, Adolfo Maldonado Peniche, y de producción audiovisual, Dianella Reyes Cardeña, pidieron el apoyo del ejecutivo estatal y una fecha, definitiva, para poder reanudar sus actividades.
Por su lado, Camino Escalante recordó que desde el mes pasado (21 de diciembre) entregaron al Ejecutivo Estatal una carta compromiso y solicitud de reactivación de sus negocios en la que asumieron la responsabilidad de cumplir con una serie de medidas que garanticen un Evento Seguro, libre de riesgos sanitarios para los asistentes.
Empero, lamentó, hasta ahora no han tenido una respuesta, lo que los mantiene al borde del precipicio empresarial y, en concreto, a un mes del cierre, con lo que ello representa para empleados suyos y de los proveedores que colaboran en estos proyectos.
Estimó que, en total, la pérdida que acumulan en estos 10 meses de la pandemia fluctúa entre los mil 200 y mil 500 millones de pesos, que día a día aumenta por tener que pagar sueldos y obligaciones impositivas, además de la falta de ingreso que registran desde marzo de 2020, cuando inició la contingencia. Estos montos estimados involucran varios rubros como hotelería, transportadoras, restaurantes, agencias de viajes, haciendas, salones de eventos, proveedores de mobiliario, banquetes, floristas, decoradores, diseñadores de modas, tiendas y alquiler de vestimenta, salones de belleza, ballet parking, djs, grupos, empresas de audio e iluminación, agencias organizadoras, reposteros, chefs, carpas y tarimas entre otros muchos necesarios para llevar a cabo estas actividades.
Agregó que en esa carta compromiso solicitaban la reapertura a partir del 12 de febrero venidero, aunque ahora estarían conformes con hacerlo desde el 20 de ese mismo próximo mes o, incluso, el 1 de marzo, para poder subsistir y evitar el cierre que sería irreversible por las condiciones en las que ya se encuentra el sector.
Gómez Nechar dijo que en este lapso han dejado de atender 230 bodas contratadas desde el exterior, ya sea desde el extranjero o a nivel nacional, lo que, en conjunto con otros eventos locales, les ha representado alrededor de 787 millones pesos que han dejado de percibir los diferentes rubros relacionados con la actividad de bodas destino.
Enfática, coincidió con Camino Escalante en que es necesario tener certeza en cuanto a una fecha para reanudar la actividad del sector, pues los eventos requieren una organización, sujeta a programación para todos los detalles inherentes a las bodas, reuniones, convenciones o el evento que fuere.
Explicó que por ese detalle, por la falta de una fecha, han perdido muchos eventos que se han ido a otros estados, como Campeche, Quintan Roo, o a otras partes del país, pues ante la incertidumbre, no pueden garantizar un día en específico, lo que los tiene ya en plena picada empresarial y económica, a ellos, a sus empleados y a su proveeduría.