Redacción.- A poco menos de tres meses de concluir el año, en Yucatán se establece un récord de incidencia de diabetes mellitus en el embarazo, al registrar 275 casos, la cifra más alta en una década, reveló la Secretaría de Salud federal.
Aunque, actualmente se ubica entre las 18 entidades con mayor número de mujeres afectadas, pero supera de manera notable a Campeche y Quintana Roo.
La patología se presenta entre el dos y el cinco por ciento de las mujeres e estado de gravidez, de ahí la importancia de que constantemente se hagan la respectiva prueba.
Asimismo, la enfermedad aparece y continúa en la mujer durante su embarazo, y si no es atendida debidamente hay el riego de dar a luz a niños con deformaciones congénitas.
Las mujeres con este mal durante la gestación tienen el riesgo de sufrir posteriormente la diabetes mellitus tipo 2.
Este mortal padecimiento no transmisible se registra ante la presencia de glucemia alta, que empieza o se detecta entre las semanas 24 y 28 de gestación.
Las hormonas del embarazo pueden bloquear el trabajo que hace la insulina, y cuando sucede, los niveles de glucosa tienden a aumentar en la sangre.
Entre las principales causas está el tener más de 25 años de edad al momento del embarazo, tener antecedentes familiares con diabetes, tener hipertensión arterial así como obesidad, e incluso, por demasiado líquido amniótico.
En lo que va del año, en la República Mexicana ya se detectaron 16 mil 992 casos confirmados acumulados de “Diabetes mellitus en el embarazo”, con un aumento del 23.59 por ciento con respecto al mismo período de 2021, cuando la suma fue de 13 mil 749.
La mayor incidencia se registra en Nuevo León, con dos mil 317 casos, el 13.64 por ciento, seguido del Estado de México, con dos mil 219, el 13.06 por ciento, y Jalisco, con mil 545, el 9.09 porcentual.
En contraste está Tlaxcala, con 40, el 0.24 por ciento, Campeche, con 60, el 0.35 por ciento, y Tabasco, con 70, el 0.41 porcentual.
Mientras que en Yucatán hay 275 casos, con un incremento del 71.87 por ciento, con respecto al mismo período del año anterior, cuyo acumulado fue de 160.
En un lapso de nueve años, el pico se registró en 2021, con 258 mujeres, seguido de 2020 con 190 embarazadas, y en 2019 fueron 169, y el mínimo fue en 2013, con 32 gestantes, y 2014 con 41.
Ahora, la situación ha cambiado, pues el récord de incidencia se registra en 2022, y que aún faltan poco más de dos meses para concluir el año.
Cabe mencionar que generalmente, no hay síntomas o son leves, y no son potencialmente mortales para la mujer en estado de gravidez, además que el nivel de azúcar o glucosa en la grande tiende a retornar a la normalidad después del parto, acotó.
Las mujeres que padecen diabetes gestacional tienden a tener bebés más grandes al nacer, por lo que aumenta la posibilidad de problemas en el momento del parto.
Hay un leve incremento del riesgo de muerte del producto cuando la madre carece de tratamiento para esta enfermedad, pero el control de los niveles de glucemia disminuye la posibilidad.