Ante el rechazo generalizado de las cámaras empresariales y del Consejo Coordinador Empresarial al aumento del impuesto a la nómina en Yucatán (enviado al Congreso local para su aprobación) el Gobierno estatal respondió hoy con un comunicado que publicamos íntegro. En efecto. Diversos organismos empresariales de Yucatán, entre ellos Canacintra, Canaima, el Centro Empresarial de Mérida, Canadevi, Canaive y Aaprotuy, exhortaron al gobierno estatal a no crear ni aumentar impuestos en 2026, al señalar que Yucatán ya figura entre los estados con más cargas fiscales. Advirtieron que nuevos gravámenes afectarían costos de producción, competitividad, inversión y empleo en sectores como manufactura, vivienda, vestido y turismo.
A continuación el comunicado del Gobierno estatal:
El Gobierno del Renacimiento Maya reitera su respeto a todos los sectores de Yucatán y mantiene apertura permanente al diálogo. Reconocemos el papel fundamental de las empresas que generan empleo, dinamizan la economía y aportan al desarrollo de Yucatán.
Ante las inquietudes expresadas por el Consejo Coordinador Empresarial, es importante aclarar que no se están creando nuevos impuestos. Se trata de un presupuesto viable y responsable con las finanzas del estado y con el dinero de la gente, porque el presupuesto 2026 regresará a la ciudadanía en programas y acciones concretas.
El paquete económico presentado, por más de 66 mil millones de pesos, fue construido con una visión de justicia social, igualdad y bienestar. Cada peso recaudado vuelve al pueblo en forma de salud, seguridad, programas sociales e infraestructura.
Para que la ciudadanía tenga tranquilidad, reiteramos que los ajustes fiscales no crean ningún impuesto nuevo. Tampoco regresa la tenencia vehicular.
El Impuesto Sobre Nómina se actualizó de 3% a 3.75%, bajo un esquema diseñado para ser justo y proporcional:
- De más de 20,000 empresas contribuyentes, solo alrededor del 4%, las de mayor capacidad económica, cubrirán el aumento completo.
- El 96% restante, que son las micro y pequeñas empresas, contará con estímulos fiscales que reducen su impacto y protegen su estabilidad.
Es una medida progresiva: quienes tienen mayor fortaleza económica aportan un poco más para que las pequeñas empresas continúen generando empleos y oportunidades. Además, no representa una carga para las y los trabajadores; por el contrario, lo recaudado los beneficia directamente.
Los recursos obtenidos se destinarán exclusivamente al subsidio del transporte público Va y Ven, utilizado diariamente por miles de trabajadores para llegar a sus centros de trabajo. No está previsto para otras obras ni acciones. Esta actualización fiscal evita cargar costos al pueblo, que no debe pagar más por un transporte digno y accesible.
Este es un presupuesto que prioriza a la gente:
- Más de 6 mil millones en programas sociales directos para mujeres, jóvenes, personas con discapacidad, campesinos y pescadores.
- Más de 6 mil millones en salud: la mayor inversión histórica en hospitales, centros de salud y atención comunitaria.
- Más de 3 mil millones para infraestructura urbana y municipal: calles, alumbrado, agua potable, escuelas y obras en colonias y municipios.
- Más de 4 mil 700 millones para seguridad, con el fin de mantener la tranquilidad que distingue a Yucatán.
Que quede claro, la actualización del Impuesto Sobre la Nómina no afecta la competitividad de Yucatán ni la generación de empleos. Somos un estado confiable y estable para invertir, gracias a la seguridad, la logística y las facilidades para poner en marcha negocios.
Además, las nuevas grandes obras, beneficiarán a las empresas y generarán más empleos de calidad, con lo que Yucatán seguirá consolidándose como un gran estado para invertir.
El Gobierno del Estado reitera su disposición al diálogo con el sector empresarial, pero siempre poniendo al centro a las familias yucatecas y garantizando que el bienestar llegue primero a quienes más lo necesitan.








