El conflicto está por estallar en la zona arqueológica de Chichén Itzá tras un receso que duró el final del sexenio de Mauricio Vila y el inicio del actual gobierno estatal. Artesanos y guías de turistas que operan en Chichén Itzá se declararon listos para defender el antiguo parador turístico de la zona arqueológica, incluso con toma de taquillas e instalaciones, de ser necesario.
En reuniones convocadas por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), los “trabajadores independientes” se pusieron desafiantes y repudiaron de manera rotunda la propuesta de traslado al Centro de Atención a Visitantes (Catvi) y con ello el cierre del paso actual.
Líderes de esos grupos de Pisté –comisaría de Tinum que sirve de entrada principal al sitio prehispánico–, manifestaron su rechazo a los “enviados” de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo.
Se trata de los siguientes funcionarios federales: Diego Prieto Hernández, titular de la recién creada Unidad de Culturas Vivas, Patrimonio Inmaterial e Interculturalidad (UCVPII) de la Secretaría de Cultura federal y de Joel Omar Vázquez Herrera, director general del INAH. Ambos tuvieron que salir por piernas.
“No queremos más a Diego Prieto en Chichén Itzá…, si insiste tomaremos medidas como las movilizaciones de enero de 2023”, anticiparon.
Los funcionarios se reunieron con ambos colectivos en el campamento de Chichén Itzá.
“No nos vamos a salir (del área que ocupan a la fecha) y no vamos a asistir a más juntas para ese tema”, advirtieron los afectados a condición de anonimato.
También remarcaron su oposición a la clausura del acceso vigente ya que el nuevo ingreso proyectado implica para los turistas caminar 1.5 kilómetros desde la estación del Tren Maya hasta los principales vestigios prehispánicos.
Algunos de los declarantes afirmaron que el Catvi se construyó sin consultar a la gente que trabaja y vive en la zona, por lo que ahora enfrenta fallas de planeación e inclusive presuntas irregularidades en el manejo del dinero invertido.
Más aún, consideraron que la urgencia de la reubicación obedecería a esas anomalías y la intención de ocultarlas. Sin embargo, evitaron ahondar en el asunto.
Prieto Hernández (quien se presentó como “delegado de la presidenta”) y Vázquez Herrera platicaron con guías de turistas (no representantes) el jueves a las 12:30 horas, y este viernes a las 10:00 AM tocó turno a los artesanos.
Ayer, el director del Centro INAH Yucatán, Víctor Arturo Martínez Rojas, llegó tarde a la cita.
Los dos “enviados” asumieron sus cargos el 16 de julio de 2025, y tendrían como encomienda el traspaso del Catvi al INAH “con los artesanos adentro” pero no tienen capacidad política ni interlocución, confió uno de los involucrados.








