Redacción / Eduardo Lliteras Sentíes.- Una nueva
estimación del impacto en las costas de todo el mundo del alzamiento del nivel
de los mares muestra una costa de Yucatán muy afectada para mediados del
presente siglo y con la posibilidad de desaparecer por completo para el fin de
siglo dependiendo del nivel que alcancen las emisiones de gases y de su impacto
en el deshielo de la Antártida. Los nuevos datos publicados en un reportaje en
la revista ?Nature? triplican las estimaciones de vulnerabilidad global al
aumento del nivel del mar y de las inundaciones costeras, dejando a la costa de
Yucatán desde Celestún y Chelem hasta El Cuyo con un fuerte impacto por la
pérdida de territorio y el desplazamiento de sus poblaciones. Hablamos de un
escenario en el que el Puerto de Progreso quedará bajo el agua, y su población
desplazada dependiendo del nivel que alcancen las emisiones de carbono y el
deshielo. Pero en cualquiera de las estimaciones, la costa de Yucatán sufrirá
no sólo erosión, sino pérdida de territorio y desplazamientos de su población.
El estudio
preparado por científicos de ?Climate Action? y publicado por ?Nature? a
principios de noviembre y dado a conocer en primicia por Infolliteras.com, modela
las elevaciones topográficas más actualizadas comparándolas con las
estimaciones promedio de la elevación de los mares para 2050 para generar un
mapa interactivo y de búsqueda.
VER MAPA
AQUÍ:
Los
resultados son dramáticos: se estima que hasta 190 millones de personas viven
hoy en tierraS debajo de lo que será el límite más alto de las mareas altas en
2100.
Sin embargo,
estas son predicciones que se refieren a un escenario en el que se implementan
medidas para contener las emisiones de carbono. Lo que realmente no está
sucediendo debido también a la actitud de países como los Estados Unidos, cuyo
gobierno anunció en días recientes su retiro del acuerdo de París sobre el
cambio climático.
En el nuevo
estudio, en el peor de los casos (aumento de las emisiones en la trayectoria
actual), los refugiados climáticos, obligados a abandonar las tierras
sumergidas y convertirse en inhabitable para el final del siglo, podrían ser
630 millones. Y 150 millones ya para 2050. Entre éstos, miles de yucatecos
desplazados de las costas del Estado.
Miami, Shanghai,
Bombay, Saigón, Venecia, Nueva Orleans, se encuentran entre las ciudades que
corren el riesgo de perder territorio o incluso hundirse.
Una situación
que también afectará a los grandes deltas, desde Alejandría hasta Egipto y el
Bayou de Louisiana.
COSTA GLOBAL
TRES VECES MÁS EXPUESTA
El nuevo análisis
revela una costa global desarrollada tres veces más expuesta a niveles extremos
de agua costera de lo que se pensaba anteriormente.
En base a
las nuevas estimaciones ?explicadas en el artículo por Scott A. Kulp y Benjamín
H. Strauss- se elaboró un mapa interactivo que a partir del año 2040 y
dependiendo de las variables de emisiones y deshielo, proporciona una visión
del impacto en las costas de todo el mundo y en particular las zonas más en
riesgo, como la península de Yucatán. El Estado de Tabasco es uno de lo que
resultará más afectado en el país por el elevamiento del nivel de los océanos,
pero el impacto se sentirá en toda la costa de la península hasta Quintana Roo.
El Cuyo
desaparecerá mientras la reserva de Sian Kaan en Quintana Roo, perderá una gran
parte de su territorio. Puerto Morelos en Quintana Roo será uno de los
municipios más afectados.
Los autores
explican que incluso con bajas emisiones de carbono y capas de hielo antárticas
estables, que conducen a niveles de mar futuros optimistamente bajos,
encontramos que los impactos globales del aumento del nivel del mar y las
inundaciones costeras en este siglo probablemente serán mucho mayores de lo
indicado por los análisis pasados ??más pesimistas.
Señalan que
incluso a la luz de las limitaciones identificadas, esta investigación,
utilizando un modelo significativamente mejorado de elevaciones costeras,
proporciona nuevas mejores estimaciones de la vulnerabilidad de las zonas bajas
pobladas a los océanos en aumento a escala mundial y nacional. La confiabilidad
aumenta con el tamaño del área evaluada y con el nivel de agua considerado; por
lo tanto, las evaluaciones globales de los niveles e inundaciones del mar de
fin de siglo, bajo escenarios de alto nivel del mar, deben considerarse más
sólidas, advierte.
HAY CIUDADES
QUE YA ESTÁN IMPLEMENTANDO MEDIDAS
La Comisión
Costera de California es el órgano con jurisdicción en las costas de ese Estado
de la Unión Americana. Ha pedido a todos los ayuntamientos con costa en el
Pacífico que presenten un plan regulador capaz de hacer frente a las
previsiones de erosión e inundaciones que ahora se dan como ciertas para los
próximos 50 años.
En esencia,
las administraciones locales requieren proyectos para fortalecer y defender las
costas (reconstrucción de playas erosionadas, barreras artificiales,
rompeolas), pero la Comisión también espera un proyecto de “retiro
estratégico” de la población de las costas.
En efecto. A
la luz de la escalada de fenómenos climáticos que evidencian el aumento del
nivel de los océanos, las ciudades deben preparar planes para el abandono de
las áreas más cercanas al agua y para la reubicación de las poblaciones más
expuestas, explica la comisión.
Esto es algo
que ya se está aplicando en Nueva Orleans y Miami (sin mencionar Fiyi o
Bangladesh) y que mide los impactos de la época por venir.