Redacción.- El primer ministro japonés, Shinzo Abe, afirmó el viernes que podría ser necesario un gasto adicional para lidiar con el brote de coronavirus, luego de que más temprano dijera que el gobierno prohibiría que las personas infectadas que muestran síntomas ingresen al país. El impacto en el turismo no se puede descartar, señalan analistas que recuerdan que hasta el 40 por ciento de visitantes en Japón provienen de China.
“La prioridad es evitar la propagación del virus y traer a los ciudadanos japoneses a casa, pero consideraré el uso de fondos de reserva si es necesario, dependiendo de los acontecimientos”, dijo Abe en respuesta a una pregunta en el parlamento. Agregó que vigilará de cerca el impacto de la propagación del virus en el turismo en Japón.
El turismo es una parte cada vez más importante de la economía de Japón. El primer ministro apunta a un aumento de visitantes a 40 millones este año. Ese objetivo podría estar en riesgo por el probable impacto en los viajes debido al virus.
Los visitantes chinos representaron el 40% del gasto de los turistas extranjeros en Japón, según Yuki Masujima de Bloomberg Economics. Abe dijo que Japón prohibirá la entrada a personas con síntomas causados por la infección por coronavirus a partir del sábado.
Abe ha recurrido a fondos de reserva recientemente para manejar las secuelas del súper tifón de octubre. El uso de los fondos se produjo como parte del paquete de estímulo de 13,2 billones de yenes para apoyar la economía que se estima que se redujo en el último trimestre de 2019 después de un aumento de los impuestos sobre las ventas, el tifón y la débil demanda en el extranjero.