Redacción.- Los trabajos de rehabilitación del Paso Deprimido continúan a buen ritmo y sin interrupciones, a pesar de algunas afectaciones ocasionadas por las fuertes lluvias vespertinas que han bañado a la ciudad, asegura el Ayuntamiento de Mérida.
En el lugar la actividad es prácticamente las 24 horas del día y están a cargo unas 60 personas, entre fierreros, albañiles, carpinteros, soldadores, electricistas, operadores de bombas y personal de coordinación y bodega.
En el sitio también se encuentran ingenieros civiles, estructuristas y personal de laboratorio que continúan al pendiente del resultado de los trabajos y constatando que la obra se realice conforme lo acordado.
Como parte de los trabajos, ha sido necesario instalar ductos provisionales y otros permanentes para canalizar las aguas del manto freático, a fin de que las actividades continúen sin contratiempos.
Son cinco equipos de bombeo instalados y protegidos por medio de “jaulas” o rejillas que los protegen de desechos propios de la obra.
Asimismo, trabajadores señalaron que en el espacio que ocupó la antigua cisterna fracturada y ya demolida se ha colado con concreto ciclópeo anti deslaves, en toda la parte centro y poniente hasta alcanzar la nueva altura de base para la nueva cisterna hermética.
En la sección oriente hasta este momento se conserva aún la mitad de la bóveda anterior, que se está utilizando actualmente para el desalojo de aguas.
Esta semana se reportan avances importantes en las labores del armado del doble emparrillado de varillas de acero de piso y paredes de la nueva cisterna que tiene un área de cincuenta por diez metros y altura media de 1.20 metros.
También hay avance en la cimbra de contención y a partir de este fin de semana comenzó el colado continuo de concreto de alta resistencia (350 Kg/cm2), con cerca de 24 ollas de 6 m3 y el apoyo de dos grúas-bomba.
Estos trabajos requieren un cuidado especial para respetar las especificaciones del proyectista estructural, que incluyen el rango de temperatura de colado, a fin de evitar alguna fisura, pero una vez listos permitirán seguir trabajando independientemente del nivel del manto freático que pudiera variar a causa de las lluvias.
El avance al cierre de esta semana es el más significativo pues a partir de la siguiente las condiciones de la zona inundada disminuirán.