Redacción.- Omar Fayad y Alito Moreno andan de la greña. Todo porque Omar quería un candidato a la gobernatura de Hidalgo a su gusto -por aquéllo de cúbranme las espaldas- y Alito quería colocar a conocida senadora amiga y familiar. Nepotismo puro.
Trascendidos señalan que Alito Moreno, había prometido una candidatura a gusto de Omar Fayad, pero claro, como era de esperarse, mintió.
En efecto. Luego de que el dirigente nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Alejandro Moreno, confirmara su adhesión a la alianza “Va Por México”, Omar lo acusó de traidor en redes sociales. Alito acordó con las cabezas del Partido Acción Nacional (PAN) y el Partido de la Revolución Democrática (PRD), entregar la candidatura para la gubernatura de Hidalgo al PAN.
Esto puso de malas al gobernador de ese estado, Omar Fayad, quien arremetió contra la dirigencia de su partido, acusando a la Comisión Política tricolor de “ceder” la definición de la abanderada en Hidalgo al partido blanquiazul como parte de la negociación por las candidaturas en ese estado, así como en Tamaulipas y Durango.
Según la Comisión priísta basa su decisión en una estrategia para presentar candidaturas competitivas y con posibilidades reales de ganar, algo que disgustó a Fayad, quien también es Consejero Político Estatal y Nacional del PRI y que acusa no haber sido convocado como tal para la toma de dicha determinación.
Esto a pesar de que, desde hace unos días, la secretaria general del CEN del PRI, Alma Carolina Viggiano Austria, ya había adelantado que, dentro de las negociaciones se había determinado que cada partido tendría las candidaturas de dos estados y que para el caso del PAN serían las de Aguascalientes y la de Hidalgo, además de que para éste último, se debería tratar de un externo y femenino, para cumplir con la cuota de género, por lo que el anuncio solamente fue para hacerlo oficial.
Tras tanto barullo se sabe que Omar Fayad tiene meses negociando con Morena la entrega del Estado a través de la candidatura a la gobernatura. Omar coqueteó con otros partidos, como Movimiento Ciudadano, pero lo que le interesa es cuidarse las espaldas, que no lo investiguen, que no le finquen responsabilidades. Y el acuerdo con Morena implica eso. Precisamente.