Redacción / Foto: Organización Meteorológica ( .- A menos que todos los gobiernos cambien sus políticas energéticas, el planeta será inhabitable, advierte el titular de la ONU, acusando a algunos líderes gubernamentales y empresariales de mentir en cuanto a sus compromisos de reducir su uso de combustibles fósiles y optar por energías limpias. Un nuevo informe revela que entre 2010 y 2019 se produjeron más emisiones de carbono que nunca, pero insiste en que aún se pueden reducir a la mitad para 2030.
El Secretario General de las Naciones Unidas conminó este lunes a los líderes a tomar medidas urgentes con el objetivo limitar el calentamiento de la Tierra a 1,5° centígrados para fin de siglo con respecto a los niveles preindustriales y alertó de la desgracia que el fenómeno acarreará si no se actúa con celeridad.
António Guterres reaccionó enérgicamente tras la publicación del más reciente informe del Panel Intergurbernamental sobre Cambio Climático (IPCC), que indica que las emisiones de carbono del periodo 2010-2019 fueron las más altas registradas en la historia y que todos los sectores económicos llevan su parte de responsabilidad.
El mundo va por la vía más rápida hace el desastre, dijo Guterres, haciendo eco del llamado de los científicos a actuar ahora o nunca para frenar el alza de las temperaturas.
Hablar de la extinción de millones de especies de plantas y animales “no es ficción ni exageración Es lo que la ciencia nos dice que resultará de nuestras políticas energéticas actuales”, señaló.
Los líderes mienten
“Estamos en camino hacia un calentamiento global de más del doble del límite de 1,5°C acordado en París en 2015. Algunos líderes gubernamentales y empresariales dicen una cosa, pero hacen otra. En pocas palabras, mienten. Y los resultados serán catastróficos. Esta es una emergencia climática”, enfatizó.
El Secretario General afirmó que, a menos que los gobiernos de todo el mundo reevalúen sus políticas energéticas, el mundo será inhabitable.
“Los científicos del clima advierten que ya estamos peligrosamente cerca de puntos de inflexión que podrían conducir a impactos climáticos en cascada e irreversibles. Pero los gobiernos y corporaciones que producen más emisiones no sólo se están haciendo la vista gorda; están echando leña al fuego”, añadió.
Guterres sostuvo que esos esos gobiernos y empresas están asfixiando al planeta al responder a intereses creados e inversiones en combustibles fósiles, pese a que las soluciones renovables pueden ser menos costosas y crear empleos, seguridad energética y una mayor estabilidad de precios.
Todos los países deben reducir el uso de combustibles fósiles
El estudio del IPCC reitera que todos los países deben reducir sustancialmente el uso de combustibles fósiles, ampliar el acceso a la electricidad, mejorar la eficiencia energética y aumentar el uso de combustibles alternativos, como el hidrógeno.
La publicación atribuye gran parte del problema a las ciudades y considera muy preocupante que las reducciones de emisiones recuperadas en la última década hayan sido menores que los aumentos de emisiones, debido al aumento de los niveles de actividad global en la industria, el suministro de energía, el transporte, la agricultura y la construcción.
Todavía puede haber remedio
No obstante el panorama lúgubre, los autores del informe insistieron en que todavía se puede reducir las emisiones de carbón a la mitad para 2030, por lo que instaron a los gobiernos a reforzar inmediatamente las acciones en ese sentido.
Por otra parte, acogió con beneplácito la disminución significativa del costo de las fuentes de energía renovable desde 2010, que ha bajado hasta un 85% en los casos de la energía solar y eólica, así como de las baterías.
El presidente del IPCC aseveró que el mundo se halla frente a una encrucijada y que las decisiones que se tomen ahora marcarán el carácter habitable del planeta.
Hoesung Lee mostró optimismo frente a la acción climática que siguen algunos países y citó políticas, regulaciones e instrumentos de mercado que han mostrado ser efectivos.
“Si estos se amplían y se aplican de manera más equitativa, pueden respaldar reducciones profundas de emisiones y estimular la innovación”, apuntó.