Redacción.- La Noche Blanca conquistó de nuevo en una jornada donde la danza, la música y otras disciplinas artísticas lograron que unas 58 mil personas tomaran las calles y se reafirmara el por qué Mérida es considerada un referente de arte y cultura.
La Dirección de Cultura informa que de las 58 mil personas que salieron a las calles en busca de diferentes experiencias artísticas y gastronómicas, 18 mil lo hicieron el pasado viernes 21 durante La Víspera y 40 mil al día siguiente, en La Noche Blanca. Se contó con el talento y la creatividad de más de mil artistas y expositores.
Arte para todos es lo que encontraron miles de personas que desde antes de las 8pm. salieron a las calles en busca de los mejores asientos para disfrutar los más de 200 eventos preparadas para la noche del sábado 22 de octubre, entre estos 17 especialmente dedicados a la danza.
Hubo programación para todas las edades, lo que se reflejó en la asistencia a los programas artísticos en las 100 sedes abiertas, donde se ofrecieron espectáculos infantiles, exposiciones de artes visuales, estrenos de danza y música, como la “Noche Swing, Mambos y Boleros” diseñada especialmente para la jornada por la Mérida Big Band y Créssida Danza Contemporánea, así como elencos con cómicos regionales y la difusión de la lengua maya con juegos tradicionales, teatro de sombras y música.
De los países invitados, Cuba estuvo presente desde La Víspera, con la entrega de la Medalla “Dr. Armando Hard Dávalos” al maestro Alberto Lara Bazaldúa y la Dra. Eloísa María Carrera Varona, que otorga la Universidad José Martí de Latinoamérica, por sus aportaciones académicas a la investigación, en emotivo acto en el que también se habló de la hermandad entre La Habana y la capital yucateca.
De la isla caribeña el coreógrafo Eduardo Blanco se llevó las primeras ovaciones en La Noche Blanca por la danza masiva “Nuestra América”, con 250 bailarines y maestros del Centro Municipal de Danza; más tarde hizo lo propio Ernesto Blanco con sus fusiones de música electrónica, ritmos latinos y caribeños.
La multiculturalidad de Mérida estuvo presente en varios momentos, como el concierto de música judía que interpretó el contratenor Emmanuel Pool en el Teatro “Felipe Carrillo Puerto” de la UADY, algunas con su laúd árabe en mano, y otras piezas acompañado en algunos momentos por el pianista James Pulles.
Quienes decidieron trasnocharse hasta pasadas las 2 de la mañana, bailaron con la cumbia chilena de la banda Chico Trujillo, la alegría tropical de los grupos locales Censurado y Los Méndez, y la comicidad regional de Tila María Sesto. Los espectáculos infantiles fueron muy concurridos con niños acompañados de sus papás quienes aplaudieron obras como “Lagartijas en patines”. “Los hilitos de mi abuela X’manikté” y “Entre quesos y ratones”.
Fueron 33 galerías las que extendieron sus horarios: Desde el barrio de Santa Ana, donde a las puertas de Soho Galleries la gente se armó de pinceles para crear obras de arte, Le Cirque con su exposición “La fiesta de la vida” y un concierto con sabor cubano por el barrio de Santiago, hasta fuera del centro histórico, en la colonia Itzimná, donde Casa Gemela y Lux Perpetua Art Centre atrajeron visitantes que gustan de las artes visuales.
Quienes caminaron por el centro histórico también se toparon con situaciones cómicas e improvisadas con el Mimo Ramón Solano.
La oferta gastronómica fue otro de los atractivos, donde más de 50 establecimientos afiliados a la Canirac Yucatán ofrecieron variedad de actividades, desde cocteles de bienvenida, y 10% de descuento en consumos al mostrar la pulsera conmemorativa del programa cultural.
La jornada inaugural de La Noche Blanca fue encabezada por el Alcalde Renán Barrera Concha, quien recordó que la iniciativa cultural surgió como una posibilidad de ocupar el espacio público y que las personas salieran a las calles a disfrutar la danza, el teatro, la música y la gastronomía, objeto que se ha cumplido en cada una de las 14 ediciones realizadas.
Durante La Víspera, la 3a. edición de la Feria del Panucho sirvió de marco para inaugurar el programa cultural. La feria, que organizó el Gremio de la Visitación de la Ermita de Santa Isabel en colaboración con el Ayuntamiento de Mérida, fue un éxito y celebró uno de los símbolos gastronómicos de Yucatán y fortaleció el espacio como atractivo turístico del barrio de La Ermita. Las ganancias en total entre los 30 puestos de panuchos, postres, bebidas y artesanías fue de $164,700, cantidad que se va de manera íntegra a las y los integrantes del gremio.