Redacción.- Si comparamos el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación (PPEF 2022) con el PPEF 2023, las participaciones federales para Yucatán crecen en un 12%, lo que equivale a 4,155 millones de pesos adicionales. Sin embargo, de los 4,155 millones de pesos de crecimiento anual, 3,200 millones de pesos se explican por el incremento estimado en la recaudación del gobierno federal, lo que está no está asegurado, consideró la diputada federal, Cecilia Patrón, quien señaló a Infolliteras.com que es muy probable que no se cumpla debido a que de acuerdo con los especialistas del sector financiero entrevistados por el Banco de México, el crecimiento económico estimado por la Secretaría de Hacienda es muy optimista. Es decir, el siguiente año será un año muy difícil para la mayoría de las personas debido a la inflación, puntualizó la legisladora panista, lo que pondrá en entredicho las proyecciones de crecimiento del gobierno federal y también los estimados del PPEF 2023.
Cecilia Patrón recordó que las participaciones incluidas en el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación (PPEF) son una estimación de lo que las Entidades y Municipios podrían recibir y dependen de la recaudación real del gobierno federal (Recaudación Federal Participable; RFP).
Si la recaudación del gobierno no cumple con su expectativa, añadió la diputada panista, las Entidades como Yucatán podrían recibir recursos del Fondo de Estabilización de Ingresos de las Entidades Federativas (FEIEF). Sin embargo, no todas las participaciones están aseguradas por dicho Fondo; aproximadamente, el 80% de las participaciones están protegidas (correspondientes a lo distribuido a través del Fondo General, el Fondo de Fomento Municipal y el Fondo de Fiscalización y Recaudación).
Insistió que de los 4,155 millones de pesos de crecimiento anual, 3,200 millones de pesos se explican por el incremento estimado en la recaudación del gobierno federal. Los 992 millones de pesos restantes no dependen de la Recaudación Federal Participable. Yucatán considera que la mayor parte de este crecimiento no es real, ya sea porque la estimación de 2022 fue más baja de lo que realmente debió ser, o porque lo estimado por la SHCP no se cumplirá. Y es importante aclarar que estos recursos no están protegidos por el FEIEF. Y quitando este efecto, el crecimiento en participaciones se explica casi en su totalidad por la estimación de recaudación de la SHCP (aproximadamente 20%)
De tal manera, la legisladora federal por Yucatán insistió en su escepticismo sobre la posibilidad de que se cumpla con el PPEF 2023 porque la inflación es un freno directo a la actividad económica. La triste realidad para millones de personas es que sus ingresos ya no están alcanzando para cubrir sus necesidades básicas de casa, vestido y alimentación; y mucho menos para otro tipo de gastos que benefician a la actividad económica, puntualizó.
En segundo lugar, porque, para frenar esta elevada inflación, el Banco de México está subiendo su tasa de referencia. ¿Esto qué significa? Que el costo del endeudamiento está subiendo muchísimo y esto tendrá un efecto negativo en la economía, afirmó.
Cecilia Patrón preguntó: ¿Por qué el aumento en los costos de endeudamiento afecta negativamente a la economía?
Y explicó: Pongamos el ejemplo de alguien que quiere comprar una casa. Como hoy te está saliendo mucho más caro contratar una hipoteca, mucha gente está decidiendo no comprar hoy su casa. Y esta menor demanda frenará la construcción de nuevas casas.
Lo grave de esta situación es que la industria de la construcción, que además ha sido tremendamente golpeada por esta “administración”, es el motor de inversión del país y está relacionada con muchos otros tipos de negocios, recordó Cecilia Patrón.
Frenar la industria de la construcción equivale a comprar menos cemento, menos ladrillos, menos pisos, menos cables de luz y también a contratar a menos trabajadores de la construcción. Y por estas conexiones con el resto de la economía, poco a poco, la actividad económica disminuirá, añadió.
Y aquí es donde tenemos que poner el foco. Tenemos que evitar que sigamos perdiendo nuestro dinero por la elevada inflación. Y esto empieza porque el gobierno ya no siga incrementando la luz ni las gasolinas. Para nadie es un secreto que la luz está mucho más cara que hace un año. Y ni hablemos de las gasolinas; hoy la gasolina es más barata en Texas que en Yucatán. Los alimentos, peor aún; ya tienen una inflación anual de más de 14%; es lo que más ha subido de precio.
Necesitamos que el presidente ya se ponga a trabajar, aunque, como lo ya evidenció el hackeo Guacamaya, sabemos que no es su fuerte