Según reporte de las Naciones Unidas, en la tarde del 17 de octubre, 471 personas, entre ellas niños, personal sanitario y desplazados internos, murieron en una explosión en el hospital árabe/bautista Al Ahli de la ciudad de Gaza, según las últimas cifras del Ministerio de Salud en Gaza. Este fue el incidente más mortífero en Gaza desde que se intensificaron las hostilidades. A raíz de este incidente, el Secretario General de la ONU pidió “un alto el fuego humanitario inmediato”. Sobre la responsabilidad del ataque, el gobierno de Israel cambió varias veces de versión: primero afirmó, presentando un vídeo, que fue la Jidad Islámica, pero después se comprobó que el horario no coincidía, entre la hora en que el vídeo fue grabado y el momento del bombardeo. Posteriormente afirmó el gobierno israelí que fue Hamas. Funcionarios israelíes y del ejército israelí también borraron mensajes publicados en la red X celebrando el ataque. Cabe mencionar que periodistas y analistas que conocen la zona han señalado que ni Hamas ni la Jidad Islámica tienen en su poder misiles, sino cohetes de factura local, por lo que la responsabilidad del ataque claramente apunta a Israel.
Por lo pronto, el número acumulado de víctimas mortales en la Franja de Gaza es de 3.478 a las 17:00 horas (18 de octubre), incluidos al menos 853 niños (a 17 de octubre), según el Ministerio de Salud de Gaza. Se cree que cientos de víctimas mortales más están atrapadas bajo los escombros, añaden las Naciones Unidas.
Asimismo, la ONU, dice que el número de desplazados internos en Gaza se estima en alrededor de un millón, incluidas más de 353.000 personas que permanecen en escuelas de la UNRWA sólo en el centro y sur de Gaza, en condiciones cada vez más espantosas.
También las Naciones Unidas informan que el asedio total de Gaza continúa. El cruce de Rafah ha permanecido cerrado, impidiendo la entrada de la ayuda humanitaria que se necesita desesperadamente, incluidos alimentos, agua y medicinas que aguardan en el lado egipcio. Los cruces de Erez y Kerem Shalom con Israel también permanecen cerrados.
La ONU dice que continuaron los disparos indiscriminados de cohetes por parte de los grupos armados palestinos contra centros de población israelíes, sin que se informara de nuevas muertes israelíes (hasta las 21:00 horas del 18 de octubre). En total, alrededor de 1.400 israelíes y extranjeros han sido asesinados en Israel, según las autoridades israelíes, la gran mayoría el 7 de octubre.
Al menos 199 personas están cautivas en Gaza, incluidos israelíes y extranjeros. En la sesión informativa de emergencia ante el Consejo de Seguridad, el Coordinador Especial de la ONU para el Proceso de Oriente Medio, Tor Wennesland, afirmó: “Necesitamos tiempo y espacio para lograr dos objetivos urgentes: la liberación inmediata e incondicional de todos los rehenes por parte de Hamás; en segundo lugar, y un acceso rápido y sin restricciones a la ayuda humanitaria para los palestinos en Gaza”.
En Cisjordania, desde la tarde del 17 de octubre, las fuerzas israelíes han matado a tres palestinos durante las protestas tras la explosión en el hospital Al Ahli de Gaza. Esto ha elevado a 64 el número de palestinos asesinados por las fuerzas o los colonos israelíes desde el 7 de octubre, incluidos 18 niños. Los enfrentamientos en el mismo contexto, entre manifestantes palestinos y las fuerzas de seguridad palestinas, resultaron en la muerte de un niño.
Al menos 74 hogares palestinos, integrados por 545 personas, más de la mitad de las cuales son niños, han sido desplazados de 13 comunidades de pastores/beduinos en la Zona C de Cisjordania desde el 7 de octubre, en medio de una intensificación de la violencia de los colonos y de restricciones de acceso.