Con las primeras lluvias de la temporada que apenas inicia las obras del Tren Maya comienzan a desmoronarse, literalmente, a escasos meses de su inauguración. Hoy, toda la parte superior de una de las paredes del paso a desnivel o puente que va de Maxcanú hacia la zona arqueológica de Oxkintok, comenzó a desprenderse. Hablamos de las paredes de bloques de concreto y el guardarriel, dejando a la vista la arena acumulada para edificar dicha obra. Es decir, toda la obra amenaza con venirse abajo y colapsar con las lluvias que se pronostican para el fin de semana.
Las autoridades de la zona aseguraron el perímetro a fin de evitar que se acerquen personas que pudieran salir lastimadas, además de que se evaluará la situación para saber la forma de proceder, según dijeron. Claramente la obra es un riesgo para los trenes, ya que además se esperan varios días de intensas precipitaciones en la península de Yucatán.
Todo parece indicar que las lluvias que han caído son gran intensidad por esa zona provocaron que se reblandecieran los materiales del puente evidenciando su precaria y mala construcción. El puente se eleva desde la calle 12 de Maxcanú hacia Oxkintok, pasando sobre las vías del tren Maya.
Varias placas de concreto se vinieron abajo, llevándose además partes del guardarriel de la parte superior del puente, cerca el fraccionamiento Puerta del Sol, en Maxcanú.
No se reportan lesionados ni daños a otras partes de la estructura, pero se cerró el paso de vehículos sobre el puente.