Joaquín Díaz Mena, Gobernador electo de Yucatán, acompañó a la presidenta electa de México, Claudia Sheinbaum Pardo, En el marco del VII Consejo Nacional de Morena. La parafernalia del poder es del pasado de corrupción y privilegio
Durante el Consejo, se llevó a cabo la elección de la nueva dirigencia del partido, con Luisa María Alcalde como presidenta, Carolina Rangel Gracida como secretaria general y Andrés Manuel López Beltrán, hijo del presidente Andrés Manuel López Obrador, como secretario de organización.
Joaquín Díaz Mena expresó “su optimismo sobre el rumbo de Morena” bajo esta nueva dirección, afirmando: “Estamos seguros de que este movimiento del pueblo de México seguirá trabajando para transformar nuestro país” y destacó la relevancia de una nueva generación de jóvenes que tomará las riendas del partido, lo que augura un futuro lleno de energía y compromiso en la consolidación de la Cuarta Transformación.
En su mensaje, la presidenta electa de México, Claudia Sheinbaum Pardo, recordó que el presidente Andrés Manuel López Obrador “tuvo la visión de que era necesaria una nueva organización política; así Morena se constituyó como organización en el 2011; en 2018 el pueblo de México llevó a Andrés Manuel López Obrador a la presidencia de México, con el objetivo de iniciar la cuarta transformación de la vida pública de México, 6 años después, podemos decir con certeza que la Cuarta Transformación es una realidad en el presente y en nuestra historia”, afirmó.
’’No creemos en el consumismo ni el poder del dinero, ni en la avaricia y no, no nos arrodillamos nunca frente al poder del dinero, ni frente a ningún poder extranjero. Creemos en un pueblo de libertades, en un México de libertades, de justicia, un México soberano, de democracia verdadera donde el que mande sea el pueblo de México’’, manifestó Claudia Sheinbaum.
Por lo anterior, la presidenta electa dijo: solicito a las y los militantes de Morena seguir fortaleciendo los principios de la Cuarta Transformación, escuchando y sobre todo defendiendo siempre al pueblo de México, por les dejó una serie de reflexiones para la nueva dirigencia que hoy será elegida:
- El valor de la unidad. No creo exagerar al decir que somos el movimiento social y político más fuerte de todo el mundo, de todo el planeta, porque tenemos un pensamiento claro y principios sólidos. No es trivial la unidad que hemos logrado, miren otros movimientos en el resto del mundo y vean a la derecha, en una división interna sustentada en el incumplimiento de pactos sin escrúpulos. La unidad en nuestro movimiento de Transformación, se construye con base en principios, en las causas por las que hemos siempre luchado; en el reconocimiento de que juntos y juntas somos invencibles y en la madre de todos nuestros anhelos, el bienestar del pueblo de México y el interés supremo de la patria, que están por encima de cualquier interés personal, por más legítimo que sea. No apostemos, compañeros, compañeras, nunca a la división interna, jamás, todos y todas tenemos algo que aportar; recordemos, como dice el Presidente: “La política es principios, pero también es eficacia”.
- Todos los militantes de Morena deben comportarse con honestidad y sencillez. La parafernalia del poder es del pasado de corrupción y privilegios. No caigamos nunca en la frivolidad, en el consumismo y la ambición por el poder y el dinero. Morena es el instrumento del pueblo de México. Morena es pueblo.
- Que nunca se permita el amiguismo, el influyentismo y nepotismo; ni tampoco el sectarismo o el exceso de pragmatismo sin principios. Morena debe ser luz de honestidad y ejemplo para toda la sociedad.
- No ser un partido de Estado. El gobierno de la república cumple sus tareas para la transformación del país y el partido cumple las suyas. Para ello nuestro partido debe fortalecerse sin caer en el burocratismo. La fuerza de Morena es la organización desde abajo. Sus comités de base, su contacto permanente con el pueblo, como lo sabemos hacer todas y todos, casa por casa, entregando el periódico Regeneración.
- Mantener fuerte y sólido el Instituto de Formación Política, que consolide el Humanismo Mexicano como nuestro pensamiento y que continúe con la revolución de las conciencias. Que no se pierda el aprendizaje de la historia de México y de nuestro movimiento y que se consoliden nuestros principios en la militancia, para que puedan proyectarse a la sociedad.
- Seguir siendo partido y seguir siendo movimiento. La movilización social para defender los derechos del pueblo de México y la consolidación de nuestro pensamiento debe seguir siendo nuestra fortaleza en esta movilización.
- Garantizar que los candidatos y candidatas sean decididos por el pueblo a través de las encuestas. Esta ha sido una de nuestras grandes fortalezas. Que se fortalezca la Comisión de Elecciones y que se garantice que la Comisión de Encuestas realice con transparencia y rigor metodológico la selección de todos los candidatos y candidatas. Mientras sigan existiendo las y los candidatos plurinominales, garanticen que sean emanados de tómbolas en el marco de los estatutos de nuestro partido; que todos y todas tengan una oportunidad.
- Los gobiernos emanados de Morena deben garantizar la austeridad republicana, honestidad y la cercanía con el pueblo, y el principio de que “Por el bien de todos, primero los pobres”.
- No puede haber colusión con la delincuencia, ni organizada ni de cuello blanco.
- Luchemos siempre, siempre contra la discriminación, el racismo, el clasismo, el machismo y tengamos la certeza de que somos un instrumento del pueblo para seguir empoderándolo, y con ello garantizando la Transformación de México para alcanzar más justicia y democracia en nuestro país.
Durante el evento, Alfonso Durazo, gobernador de Sonora y presidente del Consejo Nacional de Morena, leyó una “emotiva carta” del presidente Andrés Manuel López Obrador, quien está próximo a concluir su mandato. En su mensaje de despedida, López Obrador expresó:
“Me retiro de la política y vida pública, con un gran agradecimiento al pueblo, y a ustedes por su apoyo como gobernante. Mi tarea está por concluir en unos días, pero este partido tiene mucho por delante. Pongan siempre el interés de México por encima de las rencillas personales, fortalezcan la hermandad, el compañerismo y la unidad, la humildad y la honestidad. No permitan que los antiguos vicios de la política florezcan en nuestro partido, eviten la prepotencia y el poder por el poder. No roben, no mientan y no traicionen al pueblo. Sigan construyendo la nación que imaginamos en nuestro caminar. Hasta siempre”.
El evento marcó un momento histórico para Morena, consolidando su liderazgo de cara a los desafíos futuros y reafirmando el compromiso con los principios que han guiado al partido desde su fundación.