El desequilibrado mental que irrumpió en la escuela Secundaria Agustín Vadillo Cícero del centro de Mérida fue identificado como J.A.T.M. quien además de ser un “falso” psicólogo que burló a los directivos de dicha escuela publica encerrándose durante unos 40 minutos con alumnas y alumnos del tercer grado grupo F del turno matutino a los que habló del suicidio, incitó a realizar sexo en grupo además de destruir el mobiliario escolar y consumir drogas. El sujeto quien además de haber presumido tener una inteligencia superior al promedio, fue descrito como un hombre de aproximadamente 2 metros de alto y de complexión robusta, que no sólo intimidó a los jóvenes sino que los aterrorizó.
Increíblemente dicho sujeto secuestró a los chavitos del 3°F y los motivó a consumir sustancias ilegales y realizar conductas depravadas y perversas entre los menores de edad.
No sólo logró intimidar a los estudiantes sino que los incitó a atentar contra su propia vida, consumir drogas y realizar actos sexuales grupales.
En efecto, durante la mañana del martes dicho sujeto logró infiltrarse al tercero “F” de la secundaria “Agustín Vadillo Cicero” para agredir verbalmente a los estudiantes.
Ante la ausencia de uno de los maestros -no se sabe aún cómo supo dicha información- el sujeto llegó al colegio presentándose como psicólogo, logrando el acceso a las instalaciones y dirigiéndose al salón mencionado.
Datos recabados y testigos que pidieron anonimato, externaron que el hombre empezó a insultar a los presentes y a hablarles de temas como el suicidio.
El ruido en dicho salón de clases llamó la atención de las autoridades del plantel, pues el hombre pidió que los alumnos comenzarán a aventar las sillas, discutir entre ellos, romper las ventanas, entre otros actos violentos.
Finalmente, el hombre fue retirado del plantel por el mismo director tras aterrorizar al grupo con el que pasó más de una hora.
Los padres de familia no se quedaron con brazos cruzados, pues este miércoles se presentaron en la escuela para reclamar lo ocurrido. También se pidió más seguridad dentro y fuera del edificio. Aunque el hecho ocurrió ayer y las autoridades educativas no dieron parte a la policía, los padres de familia exigieron una explicación.
Se espera que en días días las autoridades estatales en materia de educación tomen cartas en el asunto, pues el caso ya se hizo viral en todo Yucatán.

