Un agente de la Policía Estatal de Investigación (PEI) que conducía una unidad de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) protagonizó un choque múltiple en el Fraccionamiento Juan Pablo II. El policía conducía e iba acompañado por dos policías más; perdió el control y chocó contra dos vehículos estacionados: un auto y una camioneta.
Una florista, quien a escasos metros atendía su negocio, estuvo a punto de ser arrollada por el conductor de la patrulla desbocada rotulada con la leyenda “Escena del Crimen”.
El agente, en un intento desesperado por esquivarla, giró el volante y terminó estrellándose contra un árbol, para luego impactar aún con fuerza a los dos autos estacionados.
De inmediato llegaron al lugar dos camionetas de la policía estatal. Según testigos, de dichas patrullas bajaron más agentes que, en un movimiento rápido, cargaron al conductor como si fuera un fardo y se lo llevaron de la escena del choque.
Los vecinos molestos exigieron a gritos una prueba de alcoholemia del conductor. Sin embargo, según los vecinos los uniformados se negaron rotundamente.
Los otros dos agentes fueron subidos a una ambulancia en medio de la confusión, sin permitirles dar explicaciones. El hermetismo de las autoridades avivó las sospechas de los habitantes.



