Redacción.- En La Habana, Cuba, dieron el último adiós a Alicia Alonso, la legendaria bailarina de danza clásica de Cuba, quien murió este pasado jueves a los 98 años de edad, según informó el Ballet Nacional de Cuba (BNC).
Alonso falleció en el Centro de Investigaciones Médico Quirúrgicas (CIMEQ) de La Habana, donde se encontraba por problemas de salud.
Ese mismo día, el Ballet Nacional de Cuba (BNC), que ella fundó en 1948 junto a Alberto y Fernando Alonso, planeaba viajar a la occidental ciudad de Matanzas para brindar dos funciones en el Teatro Sauto, recién reabierto en la llamada Atenas de Cuba tras una reparación capital.
La noticia de la defunción del ser humano dejó al mundo en shock y por momentos se pensó cancelar cualquier evento en la isla, pero ningún pensamiento en torno a Alicia encaja con quietud y bastante evadía hablar de la muerte como tema de conversación.
Fue una de las más reconocidas bailarinas de ballet y coreógrafas del mundo, cofundadora del BNC y responsable de entrenar a varias generaciones de bailarines durante la revolución cubana.
Alonso también participó en la fundación del American Ballet Theatre en Estados Unidos y hasta el final de sus días se mantuvo al frente del BNC.
Conocida como Prima Ballerina Assoluta, recibió también el Premio Nacional de Danza en Cuba y la Medalla de Oro del Círculo de Bellas Artes de Madrid, en España, entre muchos otros reconocimientos como el grado de Oficial de la Legión de Honor, que le otorgó en 2003 el entonces presidente de Francia, Jacques Chirac.