Redacción.- Los líderes de la Unión Europea continúan negociando este domingo el plan de rescate para mitigar el impacto de la crisis del coronavirus. Hay grandes diferencias entre los países del sur y del norte sobre cómo repartir el paquete de estímulos. El presidente del Consejo Europeo endurece las condiciones que se exigirán a España e Italia a cambio de las ayudas para la reconstrucción. Se habla de un fondo anticrisis de 750.000 millones de euros para salir al rescate de España e Italia, los países más golpeados en Europa por la pandemia y la consecuente crisis económica.
Por un lado el bloque del norte con los países escandinavos y la Holanda de Mark Rutte a la cabeza aboga por la austeridad y reformas estructurales a cambio del dinero comunitario; del otro los países del sur, con Francia, España e Italia, entre los más castigados por el virus, reclaman fondos sin condiciones o supeditados a unas muy asumibles.
Por lo pronto, Holanda ha conseguido endurecer las exigencias en materia de ajustes y reformas que se impondrán a Madrid y Roma a cambio del rescate, de ser aprobado en los próximos días.
Los nórdicos siguen pensando que si España e Italia están en problemas por el Covid-19 es porque han gastado demasiado y no han hecho las reformas necesarias. Así lo dijo el ministro holandés de Finanzas, Wopke Hoekstra, en plena emergencia sanitaria, unas declaraciones que provocaron un choque diplomático con el primer ministro portugués, António Costa, que tachó su discurso de “repugnante”.
Holanda y Austria temen que Madrid y Roma malgasten los fondos europeos en iniciativas no productivas, como el ingreso mínimo vital o los cheques de vacaciones que ha puesto en marcha Conte,
Por su parte, primer ministro británico, Boris Johnson, no quiere tener que imponer un segundo confinamiento en caso de un rebrote del coronavirus, según ha reconocido en una entrevista publicada este domingo por The Sunday Telegraph.