Redacción.- Aleksandr Grigórievich Lukashenko, actual presidente de Bielorrusia, cargo que ocupa desde el 20 de julio de 1994, utilizó cazas rusos MIG29 para forzar el aterrizaje en Minsk de un avión comercial de Ryanair que iba de Atenas, Grecia, a Vilna, Lituania. El objetivo de dicho acto de piratería aérea fue detener al periodista crítico de su régimen -calificado de dictadura- Roman Protasevich, fundador del canal opositor Nexta incluido en una “lista de terroristas” oficial, y quien era uno de los pasajeros a bordo:_fue detenido en el aeropuerto bielorruso.
En efecto. El vuelo FR4978 de Ryanair estaba programado para operar hoy desde Atenas, Grecia, a Vilnius, Lituania. Sin embargo, cuando el Boeing 737-800 se encontraba sobre el espacio aéreo bielorruso y estaba a punto de entrar en el espacio aéreo lituano, hizo un giro brusco y se desvió a Minsk, la capital de Bielorrusia.
Hay una variedad de razones por las que pueden ocurrir desviaciones de aviones, que van desde emergencias médicas hasta fallas mecánicas. Sin embargo, como notará al mirar la trayectoria de vuelo, en el punto de desvío el avión estaba aproximadamente a la misma distancia de Vilnius y Minsk.
Algunos se preguntan por qué se habría desviado el vuelo. Algunos informes sugieren que esta desviación se debió a una “amenaza de bomba”. Aunque primero se había afirmado que se trataba de una pelea entre pasajaron Sin embargo, el periodista bielorruso más buscado estaba en vuelo.
Se trata de Roman Protasevich un conocido periodista bielorruso que actualmente vive en Lituania y quien precisamente se encontraba en este vuelo.
De hecho, algunas voces afirman que la desviación fue con dicho propósito: con el fin de arrestar al famoso periodista bielorruso Roman Protasevich quien en Bielorrusia, enfrenta a la pena de muerte.
Raman Pratasevich es un periodista bielorruso y editor. Cubrió activamente los eventos de la campaña electoral de 2020 y las protestas posteriores. Las fuerzas de seguridad bielorrusas iniciaron varios casos penales en su contra, y lo pusieron en la lista de terroristas.
Roman Protasevich, fundador del canal opositor Nexta incluido en la “lista de terroristas”, era uno de los pasajeros a bordo y fue detenido en el aeropuerto bielorruso.
De hecho, según el medio Descifrando la Guerra, el editor jefe de Nexta asegura que había oficiales del KGB en el avión. Éstos “comenzaron una pelea con la tripulación” asegurando que había un explosivo a bordo. Momentos antes de salir de espacio aéreo de Belarús, la tripulación “se vio forzada a enviar un mensaje de SOS”