Redacción.- Brasil se queda sin carnaval por segundo año consecutivo. Las autoridades de Rio de Janeiro decidieron este martes suspender sus multitudinarios desfiles callejeros del próximo carnaval, ante el avance de la variante ómicron que, combinada con las fiestas de fin de año, está provocando un aumento de casos en todo el país. Los desfiles de las ‘escolas’ de samba, que ocurren en un ambiente más controlado dentro del Sambódromo, de momento se mantienen para fines de febrero.
"El carnaval callejero en la forma que tuvo lugar en 2020, que no sucedió en 2021, no se llevará a cabo en 2022", dijo el alcalde Eduardo Paes en una transmisión en vivo en las plataformas de redes sociales. El desfile callejero de bandas musicales llamados "blocos" es diferente a la procesión más conocida de las escuelas de samba que se realiza en el Sambódromo de Río. El Sambódromo tiene capacidad para 70.000 personas en un estadio que permite a las autoridades controlar a quienes ingresan.
Entre las opciones disponibles para ellos se encuentran la prueba de vacunación, una prueba de covid negativa y el uso de máscaras para los asistentes. “El carnaval callejero, por su naturaleza y su vertiente democrática, imposibilita cualquier tipo de control”, dijo Paes. En 2020, se estima que hubo siete millones de juerguistas en los desfiles callejeros de días de duración, según la agencia de viajes Riotour.