Redacción.- Cruce de acusaciones por el sabotaje de los gasoductos en el Mar Báltico. Mientras la Unión Europea y el gobierno de los Estados Unidos puntan a señalar a Moscú, el gobierno ruso acusa a la Organización del Tratado del Atlántico Norte y Washington. Algunos medios de comunicación especulan, en lo que es una peligrosa escalada en el conflicto militar que tiene lugar en Ucrania.
En un comunicado la OTAN, afirmó que “el daño a las tuberías Nordstream 1 y Nordstream 2 en aguas internacionales en el Mar Báltico es motivo de gran preocupación. Toda la información actualmente disponible indica que esto es el resultado de actos de sabotaje deliberados, imprudentes e irresponsables. Estas fugas están causando riesgos para el envío y daños ambientales sustanciales. Apoyamos las investigaciones en curso para determinar el origen de los daños”.
“Nosotros, como aliados, nos hemos comprometido a prepararnos, disuadir y defendernos del uso coercitivo de la energía y otras tácticas híbridas por parte de actores estatales y no estatales. Cualquier ataque deliberado contra la infraestructura crítica de los Aliados se enfrentaría con una respuesta unida y decidida”.
Por su parte, el jefe adjunto de la administración del Kremlin, Sergei Kirienko, dijo que “la OTAN está utilizando a Ucrania como arma en la guerra que libra contra Rusia”.
“Somos muy conscientes de que todos los países de la OTAN están luchando contra nosotros en el territorio de Donbás y Ucrania, y estos países utilizan a los ciudadanos de Ucrania como carne de cañón para esta guerra”, dijo Kirienko en un discurso.
A su vez, el jefe del Comité de Asuntos Internacionales de la Duma Estatal de Rusia, Leonid Lutski, afirmó que “la alianza nórdica está trabajando para evitar que las negociaciones sobre Ucrania pongan fin a la crisis”.
La portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, María Zajárova, informó este miércoles que su país pretende convocar una sesión oficial del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (ONU) para analizar las fugas de gas que tuvieron lugar en los gasoductos Nord Stream1 y Nord Stream 2.