Redacción.- En 2023, el Parque Científico y Tecnológico de Yucatán (PCTY) se convertirá en un Organismo Público Descentralizado (OPD), por lo que ya tendrá un presupuesto propio, otorgado por el gobierno del Estado, reveló el coordinador de Desarrollo Institucional del ramo, Joaquín Alcocer Velázquez.
Asimismo, informó que el parcial abandono que sufrió el PCTYT, durante el período más álgido de la pandemia de Covid-19, provocó el deterioro de equipo eléctrico y electrónico, e incluso, algunas oficinas y laboratorios se convirtieron en refugio de diversas especies de animales.
Expresó que nuevamente está en funcionamiento el PCTY, e incluso, en este año se convertiría en una OPD, similar a una universidad tecnológica, por lo que se realizan todos los procesos, como darse de alta ante la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, así como ante la Consejería Jurídica.
El próximo año se tendría recursos propios, “de hecho ya fueron asignados, sólo falta su aprobación ante el Congreso del Estado, pero desconozco el monto que se le asignará al Parque”, subrayó.
Actualmente, ya están establecidas la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el Centro de Investigación en Geografía y Geomática (CentroGeo), y la Unidad Peninsular del el Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social (Ciesas).
Asimismo, está el Centro de Investigación Científica de Yucatán (CICY) y el Centro de Investigación en Asistencia y Diseño Tecnológico del Estado de Jalisco (Ciatej).
Incluso, hay dos empresas particulares, una de las cuales están destila wiski de maíz y la otra elabora harina con semillas de ramón, y en 2023 se prevé dos más, con la oportunidad de aceptar a más, siempre y cuando tengan una base científico – tecnológica.
De igual forma, en 2023 la Unidad Mérida del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav) estrenará laboratorios, y su edificio tiene un avance del 80 por ciento, mientras que la Universidad Marista pretende construir una unidad.
Secuelas del Covid-19
En México, el primer infectado de Covid-19 apareció el 27 de febrero de 2020, y 17 días después, el 13 de marzo se registró el primer caso en Yucatán, por tal motivo a partir del tercer mes del año se estableció el plan de resguardo domiciliario para evitar la propagación de la pandemia.
Por ende, todos los trabajadores del Parque acataron la disposición y formaron parte del operativo de interrupción temporal de la actividad escolar, laboral y recreativa, así como la movilidad en el espacio público.
Al retornar, meses después, en diversas unidades y laboratorios se registraron diversas irregularidades, pues en algunos casos se quemaron equipo de aire acondicionado así como computadoras.
“La humedad estancada por casi dos años fue el principal factor de la falla del equipo eléctrico y electrónico”, acotó el entrevistado.
Mientras que otros edificios, los animales silvestres ingresaron e hicieron sus respetivas madrigueras, por lo que hubo que limpiar el área y devolver a las especies a su hábitat natural.