El candidato presidencial de Ecuador, Fernando Villavicencio, fue asesinado a balazos esta tarde en la capital Quito. El asesinato de Fernando Villavicencio, de 59 años se dio en un momento en que el país sufre una escalada de la violencia por la acción de bandas criminales. A diario se reproducen múltiples informaciones de asesinatos, matanzas, extorsiones, ataques con explosivos, entre otros delitos, según reportes de prensa. Villavicencio aseguraba que para acabar con la mafia se debía actuar con consecuencias penales para los jueces, “de nada sirven los operativos para atrapar criminales si saldrán al día siguiente”. “Me han dicho que use chaleco antibalas” decía Fernando Villavicencio. Pero no hizo caso.
Según vídeos que circulan en redes sociales lo mataron con tres tiros a la cabeza, pese a una numerosa escolta que lo acompañaba a su auto saliendo de un mitín.
Un día antes acusó amenazas del mexicano Cártel de Sinaloa y esta mañana prometió en un programa de televisión combatir a las mafias internacionales que trafican cocaína en su país.
Al momento de su asesinato se ubicaba en cuarto o quinto lugar en las encuestas con el eslogan “Es tiempo de valientes” y un programa de gobierno centrado en el combate a la corrupción.
Ecuador cerró 2022 con la mayor tasa de muertes violentas de su historia, al registrar 25,32 por cada 100.000 habitantes, la gran mayoría asociada, según el Gobierno, al crimen organizado y al narcotráfico, que ha ganado fuerza en la costa y ha convertido a los puertos en grandes trampolines para la cocaína que llega a Europa y Norteamérica.