Comunicado de Salva la Selva.- La industria de los hidrocarburos amenaza a las personas, el medio ambiente y el clima en África, donde muchas personas se oponen su extracción contaminante. Ahora, el gobierno alemán pretende importar más gas y petróleo del continente, sobre todo de Nigeria. Pedimos al Canciller Scholz que abandone esta política desastrosa.
Desde hace más de 50 años, empresas como Shell, Chevron y ENI explotan yacimientos de petróleo y gas en el delta del Níger y frente a la costa. Esta región es una de las más contaminadas del mundo, donde los bosques de manglar destruidos, el petróleo flotando en la superficie de los ríos, los incendios y el humo negro que contamina el aire conforman un paisaje apocalíptico.
Nigeria sirve de ejemplo demostrativo, por ejemplo, cuando defensores de la naturaleza en países vecinos como la República Democrática del Congo piden a su gobierno que no subaste 30 bloques de petróleo y gas o cuando necesitan informar a la población de los estragos que el negocio del petróleo podría causar en su existencia.
Está claro que el desastre medioambiental que afecta al delta del Níger no preocupa al canciller alemán, Olaf Scholz, que visitó Nigeria el 29 de octubre de 2023 en calidad de comprador jefe de petróleo y gas. En esa ocasión, animó al país africano, hasta ahora proveedor insignificante para Alemania, a aumentar su producción de gas y a ponerla en el mercado.
Desde la guerra de Rusia contra Ucrania, Europa, y Alemania en particular, desean independizarse de las importaciones rusas. Ya no parece importar de dónde proceda el gas: Canadá, Senegal, Qatar. Y ahora Nigeria.
Podría darse un escenario similar: instada por Alemania, Nigeria está invirtiendo miles de millones de dólares en infraestructuras de petróleo y gas. Dentro de unos años, Alemania optará por las energías renovables y reducirá considerablemente sus importaciones. Mientras, Nigeria, donde el potencial de producción de energía solar y eólica es enorme, seguirá sumida en los combustibles fósiles debido a las elevadas inversiones.
Los ecologistas de Nigeria y otros países africanos amenazados por proyectos de petróleo y gas, como Uganda y la RDC, piden un cambio de rumbo de 180 grados.
¡Apoyémosles! Firma hoy la petición y ayúdanos a llegar a más personas.