El periodista Julian Assange acaba de ganar el derecho a una apelación completa ante el Tribunal Superior del Reino Unido, lo que le otorga la oportunidad de presentar su caso nuevamente ante un tribunal británico antes de que pueda avanzar cualquier proceso de extradición a Estados Unidos. “Pasamos mucho tiempo escuchando a Estados Unidos mientras le ponía lápiz labial a un cerdo pero los jueces no se lo creyeron”, dijo Stella Assange al reaccionar a la noticia de última hora de que los tribunales concedieron a Julian Assange el derecho de apelar su extradición a los Estados Unidos. Stella, también llamó a la presidencia de Joe Biden a abandonar el caso tras 14 años de persecución implacable contra el fundador de Wikileaks (incluidos planes de asesinarlo), quien se encuentra en la prisión de máxima seguridad londinense de Belmarsh. Se le ha concedido el permiso para apelar contra la orden de enviarlo a Estados Unidos para ser juzgado por filtración de secretos militares y crímenes de guerra, que según los fiscales ponía en peligro su vida.
Assange tiene ya casi 14 años de cautiverio entre la embajada de Ecuador y la prisión de Belmarsh sin haber sido sentenciado de ningún cargo. En efecto. Permanece en prisión preventiva en la cárcel londinense de alta seguridad de Belmarsh desde abril de 2019, cuando el gobierno de Estados Unidos exigió le fuera entregado para procesarlo al gobierno británico. En 2010 fue detenido por exigencia del gobierno de Suecia con acusaciones falsas, un caso hoy archivado. Por tales acusaciones estuvo en arresto domiciliario. Entre 2012 y 2019, se refugió en la embajada de Ecuador en Londres, hasta que ésta le retiró finalmente el asilo político, siendo sacado a la fuerza y detenido en Londres y trasladado a Belmarsh, en medio de un aparato de seguridad vergonzoso y con la colaboración de agencias de espionaje, que lo han estado espiando durante años y buscando cómo deshacerse de él.
“A medida que avanza el caso, queda cada vez más claro para todos que Julián está en prisión por hacer buen periodismo. Por exponer la corrupción. Por exponer las violaciones a personas inocentes”.
“Julian… mucha gente te apoya y hay mucho amor por ti y vamos a luchar contra esto hasta el final” – fue la reacción del político británico Jeremy Corbin cuando se concedió la apelación de Assange.
“La Primera Enmienda y la libertad de expresión van a ser juzgadas en el Reino Unido”, dijo por su parte Gabriel Shipton ante el anuncio del derecho de apelación de su hermano Julian Assange.
“Identificó los crímenes de guerra que se estaban cometiendo… e hizo como todo buen periodista; las investigó… demostró que las pruebas eran irrefutables y las publicó” John McDonnell, también político británico.
Los magistrados también habían solicitado garantías de que a Assange no se le impondría en ningún caso la pena de muerte si fuera encontrado culpable de los diecisiete delitos de espionaje que se le imputan por haber filtrado a través de la plataforma Wikileaks cientos de miles de documentos comprometedores para Washington sobre abusos del Ejército en las guerras de Afganistán e Irán, asesinatos de civiles y torturas.
El fundador de Wikileaks en 2010 mostró al mundo más de diez millones de documentos clasificados relacionados con guerras, espionaje y corrupción en los que se evidenciaba la política criminal estadounidense alrededor del mundo y casos de crímenes de guerra cometidos por tropas gringas en Irak y Afganistán.
Julian Assange es perseguido por la justicia de Estados Unidos, que le acusa de 18 delitos de espionaje e intrusión informática después de que la empresa WikiLeaks que fundó revelara en 2010 y 2011 crímenes de guerra de ese país en los conflictos de Irak y Afganistán.