Algunos, todavía están a la espera del momento en que el mundo vuelva a ser, lo que era, antes de la pandemia de COVID19. Pero todo indica que a pesar de los anuncios de las vacunas en ciernes de ser producidas, muchas cosas no volverán al punto donde estaban.
Una de éstas es el sector turístico. En días pasados el empresario yucateco del emporio Palace, Pepe Chapur, decía durante una entrevista vía Zoom de lo que se trata en el presente año es sobrevivir. Y nada más. Es decir, ya bastante, o mucho, visto el desplome histórico del sector. Que los tomó completamente por sorpresa.
Analistas del sector turístico a nivel internacional señalan, con razón, que a diferencia de los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001 en Nueva York, las cicatrices infligidas a los viajes y al turismo por el COVID19 parecen ser permanentes.
Es decir, estamos ante un parteaguas que significará un antes, y un después, de la pandemia.
Así lo señala Danielle DiMartino Booth en un artículo publicado en la agencia Bloomberg (e intitulado “Scars Inflicted on Travel Are Looking Permanent”) quien recuerda que la Asociación de Viajes de Estados Unidos advirtió sobre el daño ya infligido a la industria, con ocho millones de puestos de trabajo perdidos. Hasta ahora.
Entre 2014 y 2019, el sector de los viajes fue responsable de uno de cada cinco empleos creados a nivel mundial, recuerda DiMartino: Pero esa era la economía que una vez conocimos. Ahora, este enorme motor de crecimiento se ha revertido en todo el mundo.
Asimismo afirma que internacionalmente, los países más afectados son demasiado numerosos para contarlos. Pero entre éstos se cuentan los cinco países más dependientes del turismo: México, España, Italia, China y Australia, según el WTTC (World Travel & Tourism Council, Consejo Mundial del Viaje y el Turismo).
“El mal manejo de la pandemia por parte de México y el resurgimiento del virus en España están trabajando para prolongar la crisis de viajes en estos países”, afirma DiMartino, quien sin embargo escribió antes de los renovadores temores del regreso del COVID19 con el inicio del otoño en Europa.
Como efectivamente estamos viendo en éstos días, el problema en Europa se está generalizando y agravando. Gran Bretaña forzó el regreso de decenas de miles de viajeros del continente luego de que anunció el gobierno británico la reimposición de la cuarentena para quien regresa de Francia o Bélgica. De inmediato el gobierno francés replicó que se impondrán medidas recíprocas para Gran Bretaña. Que es lo que debiera hacer el gobierno mexicano con el reciente anuncio del gobierno francés de imponer restricciones a quienes viajan desde nuestro país.
A éste respecto, el WTTC afirmó en un comunicado que “está profundamente decepcionado de que miles de turistas británicos hayan visto arruinadas sus vacaciones, luego de que el gobierno del Reino Unido ha agregado más países a su lista de cuarentena, incluidos destinos clave de vacaciones de verano, como Francia y Malta. Si bien estamos de acuerdo en que la salud pública debe seguir siendo la máxima prioridad, esta medida aplastará la poca confianza que queda en el frágil sector de viajes y turismo”, afirmó.
Pero lo mismo está sucediendo dentro de las fronteras de la Unión Europea, con la reimposición de cuarentenas al grado de que comienza, de nuevo, a hablarse de suspender el tratado de Schengen
Por lo pronto, como dice el Instituto de Finanzas Internacionales, muchos mercados emergentes que dependen en gran medida de los viajes y el turismo quedarán devastados.
Por ejemplo. Los viajes representaron más de una quinta parte de la economía de Jamaica en 2018.
Pero debido a la grave afectación del Sars CoV 2 entre los adultos-mayores existe un riesgo creciente de que una generación de viajeros de edad avanzada, un pilar del turismo en el Caribe y en el mundo, se hunda en los próximos años, advierte DiMartino.
Además, puntualiza que el retroceso masivo en los viajes de negocios puede causar el dolor económico más profundo en el sector.
En conclusión, el cierre del año se prevé desolador para la industria turística, a pesar de los anuncios de las vacunas por parte de los gobiernos. El golpe que ha propinado el COVID19 hará sentir sus efectos por varios años. Lo peor, no cabe duda, y de lo que escasamente se habla, es del terrible golpe que se han llevado miles y miles de trabajadores del sector turístico, abandonados a su suerte. Que se quedaron sin trabajo de un día para otro, y que no tienen fecha de volver a tener ingresos. Enfermedades, pérdida de patrimonio, incertidumbre, han dejado a miles y miles en la total zozobra. Y de eso, nadie, habla.