Redacción / Comunicado de Prensa. El gobernador Mauricio Vila Dosal solicitó, de manera respetuosa, pero firme y urgente, el apoyo del titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Arturo Herrera Gutiérrez, para hacer una revisión integral del presupuesto considerado para 2021, no solo en lo referente a las participaciones y aportaciones a los estados, sino también al fortalecimiento de diversos fondos de gran importancia para la gobernanza y de proyectos de inversión en infraestructura que faciliten una pronta recuperación económica.
En representación de los yucatecos, así como de los gobernadores de Querétaro, Francisco Domínguez Servién, de Baja California sur, Carlos Mendoza Davis, y de Quintana Roo, Carlos Joaquín González, Vila Dosal planteó la urgencia de que las participaciones y aportaciones de 2021 sean igual a 2020 en términos reales, incluyendo datos de inflación; al estatus y proyección de los proyectos emblemáticos en los estados; también al estatus de fondos en cero, como el Programa de Fortalecimiento para la Seguridad (Fortaseg), mantenimiento de carreteras y caminos, y el fondo metropolitano.
A ello, el gobernador agregó considerar la posibilidad de cobro de multas fiscales en las entidades, así como el establecimiento de apoyos para cierres fiscales 2020 debido a las complicaciones por inversión extraordinaria en salud, mismo caso aplicable para diversos municipios con incapacidad financiera para cierre fiscal.
En el marco de este encuentro entre los integrantes de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago) y el funcionario federal, Vila Dosal expuso los retos financieros a los que Yucatán, al igual que los otros estados del país, se enfrentarán el próximo año ante las reducciones que el Gobierno Federal tiene consideradas a los presupuestos estatales para el 2021.
Acompañado del presidente de la Conago, Juan Manuel Carreras López, el Gobernador reiteró a Herrera Gutiérrez, su preocupación ante el complicado escenario financiero generado por la inactividad económica a raíz de la pandemia del Coronavirus, el cual se verá aún más afectado a causa de los recortes presupuestales dados a conocer por la Federación.
“Muchas entidades nos abocamos a dar apoyos directos a las familias y beneficios a las empresas. Adicionalmente, hemos destinado una cantidad de recursos importantes a la reactivación económica y por esta situación las finanzas estatales sufren en este momento una presión muy considerable. No es posible sostener más tiempo estas limitaciones. Estamos llegando a un grado de emergencia en la solvencia de muchas de las entidades y municipios”, recalcó Vila Dosal.
Ante lo anterior, el gobernador expresó la urgencia de buscar mecanismos conjuntos que permitan a Yucatán y todos los estados del país atender los desafíos financieros a los que se enfrentarán el próximo año, a fin de continuar impulsando la recuperación del pueblo yucateco y del mexicano, especialmente, ante la contingencia sanitaria que demandó que los servicios de salud de los estados fueran atendidos con recursos ordinarios.
“Atender lo extraordinario con recursos ordinarios fue lo común para todos los estados, estuvieran o no, adheridos al INSABI. La magnitud de la crisis forzó a que el Consejo de Salubridad Nacional expidiera un decreto para parar la economía. Eso afectó los ingresos públicos, pero también y de manera muy sensible, los ingresos de los hogares”, añadió.
Por último, Vila Dosal agradeció la disposición de Herrera Gutiérrez para escuchar los planteamientos y problemáticas y refrendó la voluntad para encontrar áreas de oportunidad que contribuyan a beneficiar a la población. “Apreciamos de antemano las soluciones que estamos seguros nos planteará”.
En el marco de esta reunión, se analizó el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación para 2021, al tiempo que el secretario de Hacienda y Crédito Público atendió las principales inquietudes que los Gobernadores externaron en relación con la situación financiera y fiscal de los estados.
En ese sentido, se acordó continuar uniendo esfuerzos y mantener la disposición al diálogo para poder hacer frente unidos y en completa coordinación la situación económica que derivó de la pandemia y poder salir adelante.