El Papa Francisco no asistió, como el año pasado, al tradicional Vía Crucis en el coliseo romano. La sala de prensa del Vaticano explicó que “para preservar su salud de cara a la Vigilia de mañana y a la Santa Misa del Domingo de Resurrección, esta tarde el Papa Francisco realizará el Vía Crucis en el Coliseo desde la Casa Santa Marta”, anunció la oficina de prensa del Vaticano.
El Papa Francisco siguió el Vía Crucis desde la Casa Santa Marta, lugar donde reside en el Vaticano, unido a la oración de 25000 personas presentes en el Coliseo de Roma.
Las meditaciones fueron escritas por el Papa y fueron leídas en cada estación por una religiosa, un eremita, laicos, sacerdotes, migrantes, personas con discapacidad, familias, catequistas, miembros de un grupo de oración, una mujer dedicada a la pastoral sanitaria, y miembros de casa de acogida y asistencia social.
Mientras la cruz que presidía el Viacrucis recorría el Coliseo de Roma, las meditaciones ofrecían una súplica por un mundo herido por la guerra, la indiferencia y el pecado: